El IPC de Alemania crece menos que hace un año y se sitúa en el 1,4% en agosto

El Índice de Precios al Consumo (IPC) de Alemania se ha situado en agosto en el 1,4%, en comparación con el crecimiento del 1,7% del mismo mes del año pasado, según los datos provisionales publicados este jueves por la Oficina Federal de Estadística (Destatis).

Frente a julio, la inflación alemana ha entrado en tasas negativas al caer al -0,2% desde el 0,5%. Mientras, el Índice de Precios al Consumo Armonizado (IPCA), ha aumentado en agosto un 1,0% interanual. En comparación con el mes anterior, ha disminuido hasta el 0,1%, según datos provisionales.

La caída en los precios de la energía, al 0,6% desde el 2,4% de julio, fue el factor clave, compensando el aumento del precio de los alimentos, al 2,7% desde el 2,1% el mes pasado, y una pequeña subida en los servicios, al 1,6%.

De esta manera, la inflación alemana se sitúa por debajo del objetivo del Banco Central Europeo (BCE) cercana al 2% antes de su próxima reunión, el 12 de septiembre, en la que se espera que anuncie nuevos estímulos.

Alemania se ha vuelto cada vez más dependiente de su economía nacional para apoyar el crecimiento, una dependencia que lo deja expuesto a cualquier debilitamiento en el mercado laboral. "Todo esto solo significa que el escudo de protección contra la desaceleración industrial y los problemas externos se está volviendo más delgado", destacan en ING.