La inflación de Reino Unido, en mínimos de dos años al frenarse al 4,6% en octubre

Los precios en Reino Unido se encarecieron en octubre al menor ritmo en dos años. La inflación se colocó en el 4,6%, moderándose considerablemente desde el 6,7% del mes anterior y registrando la lectura más baja desde octubre de 2021, según los datos de la Oficina Nacional de Estadística británica (ONS).

"La moderación de la tasa anual entre septiembre y octubre de 2023 se debió a que los precios se mantuvieron iguales durante el mes, frente a un aumento del 2% un año antes", explican.

La mayor contribución a la baja provino de la vivienda y los servicios domésticos, donde la tasa anual del Índice de Precios de Consumo (IPC) fue la más baja desde que comenzaron los registros en enero de 1950. La segunda mayor contribución a la baja provino de alimentos y bebidas no alcohólicas, donde la tasa anual fue la más baja desde junio de 2022.

Así, en octubre, los precios de la vivienda y los servicios domésticos cayeron un 0,3%. Los costes del gas bajaron un 31% y los de la electricidad descendieron un 15,6%. En ambos casos, supone la tasa anual más baja desde que comenzaron los registros en enero de 1989. No obstante, aunque los precios de la electricidad y el gas han caído mes y año, sus precios siguen siendo altos en comparación con los últimos años

El precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas moderó su subida hasta el 10,1%, frente al 12,2% en septiembre, mientras que el transporte se encareció un 0,5%, frente al 0,7% de septiembre.

Por su parte, la inflación subyacente, que excluye la energía y los alimentos, alcohol y tabaco, se moderó al 5,7%, desde el 6,1% de septiembre, hasta el nivel más bajo desde marzo de 2022.

BUENAS NOTICIAS PARA EL BANCO DE INGLATERRA

"El informe de precios al consumidor de octubre debería afianzar las expectativas de que el Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra podrá comenzar a reducir la tasa bancaria dentro de unos seis meses", comentan los analistas de Pantheon Macroeconomics.

Calculan que como los precios de los alimentos, los bienes básicos y la energía aumentarán sólo lentamente el próximo año, la tasa general debería seguir estando por debajo del 3% durante la mayor parte del próximo año, incluso si la inflación de los servicios es algo rígida. "En consecuencia, seguimos pensando que en la reunión de mayo se habrá logrado suficiente progreso hacia el objetivo del 2% como para reducir el tipo bancario al 5% y, finalmente, al 4,5% a finales del próximo año", dicen.

Para los expertos de ING, los datos son buenas noticias para el Banco de Inglaterra y creen que el organismo "debe estar muy satisfecho". "Las cifras de hoy prácticamente descartan una reanudación de las subidas de tipos en diciembre, aunque las posibilidades ya eran bajas. Por lo tanto, es probable que el próximo movimiento de tipos sea a la baja", añaden.

"El Banco de Inglaterra se sentirá alentado por las lecturas de inflación inferiores a las esperadas de hoy, tanto a nivel general como básico, y es cada vez más probable que mantenga los tipos sin cambios por tercera vez consecutiva en su próxima reunión", coinciden en interactive investor.