La inflación de EEUU repunta al 3,2% en febrero y la subyacente cae al 3,8%
Ambos índices se han situado por encima de lo esperado por el consenso
Actualizado : 14:31
El Índice de Precios al Consumo (IPC) de Estados Unidos ha repuntado en febrero al 3,2% en tasa interanual frente al 3,1% registrado en enero, según los datos publicados este martes por la Oficina de Estadísticas Laborales estadounidense. Por su parte, la inflación subyacente, que excluye alimentos y energía, ha caído una décima, hasta el 3,8%. Ambas magnitudes se han situado por encima de lo esperado, ya que se había previsto que el índice general se mantuviera en el 3,1%, y la tasa subyacente cayera al 3,7%
En términos mensuales, el IPC general aumentó un 0,4%, en línea con lo esperado. En el caso de la tasa subyacente se incrementó también un 0,4%, mismo ritmo al que creció en el primer mes del año, aunque el consenso anticipaba una moderación hasta el 0,3% en febrero.
Tanto el índice de vivienda (+0,4%) como el de gasolina (+3,8%) registraron aumentos en febrero, y su peso combinado "contribuyó con más del 60% aumento mensual del índice para todos los productos". La energía se anotó un encarecimiento medio del 2,3% durante el mes, ya que todos los índices que lo componen aumentaron su precio.
A pesar del aumento mensual, el índice energético cayó un 1,9% en los últimos 12 meses, un periodo en el que la gasolina registro caídas del 3,9%, mientras que el índice de gas natural disminuyó un 8,8% y el índice de fueloil cayó un 5,4%. En contraste, el índice de electricidad aumentó un 3,6% durante el último año.
Por su parte, el índice de alimentos se mantuvo sin cambios en febrero, tras crecer un 0,4% el mes anterior, con alzas del 0,1% para los alimentos fuera del hogar, que desaceleraron desde el 0,5% de enero. El índice de carnes, aves, pescado y huevos también aumentó durante el mes, a una tasa del 0,1%.
Estas cifras dejan el aumento interanual de los alimentos en el 2,2%, con alzas del 1% para los alimentos en el hogar y del 4,5% para la comida fuera de casa. Los cereales y productos de panadería aumentaron un 1,7% durante los últimos 12 meses, mientras que las frutas y las hortalizas se encarecieron un 0,8% en el mismo periodo.
LA VALORACIÓN DE LOS EXPERTOS
Mahmoud Alkudsi, estratega senior de mercado de ADSS, asegura que "se han logrado avances mínimos en materia de desinflación, por lo que es posible que veamos un cambio en la hoja de ruta de la Reserva Federal, dado que el objetivo del 2% parece estar fuera de su alcance".
"Dado que la inflación sigue siendo más persistente de lo que se pensaba anteriormente, podemos esperar que la Reserva Federal mantenga su enfoque de 'esperar y ver' hasta que veamos que la inflación tiende a bajar de manera constante", añade.
Los analistas de Oxford Economics aseguran que tras estos datos volverán a evaluar su pronóstico sobre los tipos de interés en EEUU, aunque avanzan que "retrasar el primer recorte de la tasa de mayo a junio tendría poca importancia para la economía en general, incluyendo el pronóstico del PIB, el desempleo y la inflación".
"Un escenario pesimista es aquel en el que las tasas están más altas por más tiempo, donde la inflación se vuelve a acelerar y las expectativas de inflación a largo plazo aumentan, lo que obliga a la Reserva Federal a reanudar el aumento de las tasas de interés. Esto es posible, pero poco probable, sobre todo porque se está gestando una desinflación derivada de la caída de los alquileres en el mercado y una desaceleración del crecimiento de los salarios nominales", destacan.
Por su parte, desde Pantheon Macroeconomics recuerdan que "se publicará otro informe del IPC antes de la reunión del FOMC de mayo, así como dos rondas completas de datos del IPP y PCE, por lo que los funcionarios de la Fed no necesitan apresurarse a emitir un juicio precipitado sobre la base de estos datos".
"Seguimos opinando que los próximos datos de inflación, junto con un débil informe sobre las nóminas de marzo y más evidencia de una desaceleración del crecimiento salarial darán a la Fed margen para flexibilizar sus políticas en mayo. Pero este momento está muy cerca y un retraso hasta junio no sería una sorpresa", agregan.
Para los analistas de eToro, "la inflación estadounidense mostró que la sorpresa alcista de enero no fue una anomalía, pero es probable que los inversores estén menos preocupados por las cifras reales de inflación y más centrados en si esto cambia las expectativas de un recorte de tipos de la Fed en junio".