Impuestos, paro, salarios bajos, autónomos... por qué España reina la economía sumergida
Un 25% de los jóvenes menores de 24 años ha cobrado en 'negro' durante los últimos tres años
Actualizado : 14:43
La economía sumergida, el problema que afecta a España por encima de sus vecinos. De hecho, nuestro país se coloca a la cabeza de los territorios europeos occidentales: históricamente se ha estimado que representa entre el 15% y el 25% del PIB, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI). ¿Por algún motivo en especial? La precariedad laboral de los jóvenes, los salarios bajos, la percepción de impuestos altos o la obligación por parte de las empresas puede estar detrás de este reinado.
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El Covid provoca la mayor caída en 50 años del salario medio: se queda en 1.641 eurosEl impacto de la pandemia del Covid-19 no ha generado un repunte en la economía sumergida, pese a que pudiera considerarse una consecuencia para sobrellevar las precarias situaciones de los trabajadores españoles. Aún así, uno de cada cinco españoles asegura que estaría dispuesto a recibir su sueldo en 'negro', manteniéndose la tendencia del año anterior, según se desprende de un informe elaborado por InfoJobs sobre salarios en 'B'.
El principal motivo por el que España lidera en economía sumergida es la actitud de las empresas. La mitad de la población activa española que declara recibir ingresos en 'B' indica que lo hace porque la empresa no le da otra opción. El segundo motivo que cita un 29% de los encuestados es la necesidad de completar su salario.
Del estudio se extraen conclusiones que varían en función de género, edad, nivel educativo y categoría profesional. Sin embargo, destaca un denominador común: a más paro, mayor posibilidad de recibir ingresos ocultos. La predisposición a cobrar el salario en 'B' es superior entre los desempleados, donde llega a un 35%. También es mayor entre los jóvenes, uno de los colectivos más afectados por el impacto de la pandemia. La situación profesional de muchos jóvenes que percibían parte del sueldo en 'negro' se ha visto agravada precisamente por este hecho, conduciéndolos a la precariedad laboral.
Un 25% de los jóvenes menores de 24 años reconoce haber recibido parte o todo su sueldo en 'negro' durante los últimos tres años. Además, los que tienen entre 16 y 24 años constituyen el colectivo con mayor voluntad a cobrar en 'B', un 40%. En cambio, entre los de 45 a 65 años, un 14% aceptaría esta práctica y sólo un 8% ha recibido este tipo de ingresos en los últimos tres años. Entre los que recibieron salario en 'B' en los últimos años hay ligeras diferencias por género: un 15% de mujeres han percibido más de la mitad de su salario sin declarar, frente a un 7% de los hombres.
Por nivel formativo, aquellos que cuentan con una formación no reglada están más dispuestos a percibir un salario en 'B' (33%) que aquellos que sólo han cursado estudios básicos (28%). Asimismo, este porcentaje desciende hasta un 19% en aquellos profesionales con estudios universitarios o superiores. Si se analiza la recepción del salario en 'negro', el 16% de los encuestados con estudios no reglados afirma haber cobrado en negro una parte de sus ingresos en los últimos tres años. Un porcentaje que cae hasta la mitad en los trabajadores con formación superior o universitaria.
Llama la atención el porcentaje de encuestados que ocupan cargos directivos y que apuntan estar abiertos a recibir una parte de su salario en 'B': el 27%. Y hasta un 14% de los encuestados en posiciones de liderazgo confirma haber cobrado este tipo de ingresos en los últimos tres años. El motivo principal que indica casi el 30% de ellos es que necesitan completar su salario, un dato que vuelve a sorprender por ser un grupo que está arriba en la pirámide salarial.
¿MUCHOS IMPUESTOS?
Más razones. Un 12% apunta a no querer pagar impuestos desproporcionados, un 6% señala no querer perder la prestación por desempleo. Por otro lado, resulta relevante que un 35% de los autónomos afirme que cobra en 'B' porque no quiere pagar impuestos, ya que los considera abusivos. En este último caso, el porcentaje es 23 puntos porcentuales más elevado que la media, recogiendo datos del portal de empleo.
Según el estudio anual 'Opinión pública y política fiscal' realizado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), más del 90% de los ciudadanos cree que en España existe mucho o bastante fraude fiscal y un 61% considera que la Administración hace pocos o muy pocos esfuerzos para evitarlo.
Un 81,4% de los encuestados señala que los impuestos no se cobran con justicia y que no pagan quienes más tienen, un 46,2% considera que los españoles pagan mucho en impuestos, y un 58,6% sostiene que, teniendo en cuenta los servicios públicos y prestaciones sociales existentes, la sociedad se beneficia poco o nada de lo que se paga en impuestos y cotizaciones. Es más, un 60,6% cree que recibe menos de la Administración de lo que paga en impuestos y cotizaciones, un 30,2% cree que recibe más o menos lo que paga, y solamente un 5,5% cree que recibe más de la Administración de lo que paga.
CONSECUENCIAS
Aunque de un primer vistazo en cobrar sin declarar una parte del salario puede parecer atractivo, a la larga tiene sus consecuencias. Además de la ilegalidad de esta práctica, la problemática más relevante para los profesionales que cobran parte de su sueldo en 'B' es que se pueden perder todo o parte del derecho a paro, recibir menores prestaciones de la Seguridad Social, e, incluso, afectarles también a su jubilación.
"La apuesta a largo plazo por el empleo de calidad, la educación y formación, y el desarrollo de políticas públicas que beneficien a los colectivos más perjudicados por la pandemia permitirá abandonar la precariedad laboral y consolidar la recuperación económica", apunta la directora de Comunicación y Estudios de InfoJobs, Mónica Pérez, quien destaca que "esta radiografía refleja que el empleo -y la calidad de éste- puede ser un factor determinante para luchar contra la economía sumergida".