El Gobierno reconocerá de oficio a finales de junio la renta mínima a 100.000 hogares

El Gobierno reconocerá de oficio el Ingreso Mínimo Vital a 100.000 hogares en un principio, que lo recibirán a finales de junio, según ha dicho este jueves el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. No obstante, se calcula que el Ingreso Mínimo Vital llegará a beneficiar a unas 850.000 familias. Esta renta mínima se aprobará este viernes en un Consejo de Ministros extraordinario.

En cuanto a la cuantía, Escrivá ha explicado en una entrevista en Onda Cero que se establecerá un mínimo nacional que después cada comunidad autónoma podrá complementar. Eso sí, "tendrá una condiciones absolutamente comunes" para todos las comunidades autónomas. "Es un mínimo, con una definición de rentas, no hay discriminación". Además, será una cantidad que complementará la renta de los hogares vulnerables hasta un mínimo en función de sus condiciones, con especial atención a las familias monoparentales.

"Estamos trabajando intentando definir bien los hogares que son beneficiarios para, desde los primeros días de junio, que haya un porcentaje significativo que pueda recibir la prestación sin tener que pedirla, para después hacer una declaración responsable y contrastar la información". Así, el ministro ha explicado que el decreto recogerá una tipología de 12 hogares y que, además del nivel de renta, se tendrá en cuenta el umbral de patrimonio.

El Ingreso Mínimo Vital se pondrá en marcha como una prestación dinámica que incorporará incentivos al trabajo, itinerarios de inserción y sello social con el sector privado o incentivos para ampliar el número de horas de trabajo con el fin de que la renta no sea disuasoria de continuar buscando un empleo. "Hemos hablado con empresarios y tercer sector porque este es un elemento que había que diseñar muy bien, como está muy bien diseñado en países nórdicos, donde tienen prestaciones más generosas y no se desincentiva la búsqueda de trabajo", ha afirmado.

Por otro lado, en cuanto al acuerdo del Gobierno con el PNV para transferir las competencias en esta materia a País Vasco y Navarra, Escrivá ha opinado que es algo que entra dentro de lo común puesto que "la singularidad foral hacer que tengamos que tener un tratamiento distinto en la gestión". "Hay que entender que estamos en periodo preelectoral y todo el mundo intenta vender cualquier cosa, pero desde el principio lo teníamos así definido". País Vasco y Navarra "tienen sus propios impuestos, los test los tienen que hacer ellos, hay que hacer una definición específica y se está trabajando con ellos", ha añadido.

DEUDA

El ministro también ha anunciado que el Gobierno ya está preparando los Presupuestos para 2021. Asimismo, ha sostenido que los sueldos no se van a bajar el próximo año ya que se trata de una crisis económica temporal. "Cuando esto acabe, y yo espero que sea pronto, tendremos que retomar el proceso de consolidación de deuda. En ese momento habrá que ver las sendas que son más razonables, los esfuerzos que son posibles". "La deuda irá mejorando a medida que el PIB retorne a los niveles normales", ha apuntado.

"Es perfectamente redefinible la situación fiscal en los términos en los que estaba planteado, con un nivel de deuda más alto, pero todavía no de los más altos de Europa, ni mucho menos". Por ello, considera que "tomando un poco más de tiempo" para el ajuste y en las condiciones actuales de tipos de interés, "no debería cambiarse el tono y la política fiscal" que el Gobierno tenía prevista antes de la crisis.