El gasto en desempleo subirá un 4% en 2019 pese a que habrá menos parados

El proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019, presentado este viernes por el Gobierno, no ha dejado a nadie indiferente. Mucho se ha hablado del récord que contemplan en la recaudación de impuestos, que se prevé que aumente en 20.000 millones hasta los 227.356 millones de euros, y no tanto de otra de las curiosidades que recoge. El Ejecutivo elevará por primera vez en cinco años el gasto en políticas de desempleo, y lo hará pese a que espera que el número de parados se reduzca este año.

La propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, lo reconocía en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Según explicó, los Presupuestos recogen un aumento del 4% en el gasto en materia por desempleo "pese a que el número de parados se reducirá". Los cuadros presentados por el Ejecutivo muestran que el desembolso del Estado en esta materia será de 18.402 millones de euros en 2019 (frente a los 17.702 millones del año pasado) para "aumentar la protección", y eso ocurrirá a pesar de que el número de parados se reducirá en unas 800.000 personas a lo largo del año, según los cálculos del Gobierno.

De esta forma, la tasa de desempleo pasará del 15,5% estimado para 2018 al 14% que el Ejecutivo prevé para este año, una cifra que por otro lado es dos décimas superior a lo contemplado en el anterior cuadro macroeconómico de octubre, y que ha sido revisado para elaborar las cuentas públicas después de que el Gobierno de Pedro Sánchez no haya logrado sacar adelante la nueva senda de déficit propuesta.

Pero, ¿por qué va a aumentar el gasto en políticas de desempleo si el número de parados se va a reducir? Muy sencillo, porque en los Presupuestos de 2019 el Gobierno ha recuperado el subsidio para desempleados mayores de 52 años. La ministra de Hacienda ha justificado el aumento "íntegramente por la ampliación de partidas sociales para los desempleados", como la recuperación del mencionado subsidio, que es una ayuda que se concede a parados de avanzada edad, con o sin cargas familiares, que hayan agotado otra prestación por desempleo y que hayan cotizado al menos seis años a lo largo de su vida. Deben, además, cumplir con los requisitos para acceder a una pensión contributiva, salvo el de la edad.

El acceso a esta ayuda se endureció con el Ejecutivo de Mariano Rajoy, que elevó la edad de acceso hasta los 55 años y que cambió varias de las condiciones que había que cumplir para poder acceder a él. En concreto, pasó a ser obligatorio que los beneficiarios se jubilasen en cuanto pudieran, se redujo la cotización de la Seguridad Social para la jubilación de estos trabajadores y se rebajó la cuantía de la ayuda cuando el último empleo hubiera sido a tiempo parcial. Ahora el gabinete de Sánchez ha decidido revertir los cambios acometidos por el PP (de hecho, se había comprometido a recuperar esta ayuda con o sin Presupuestos) de forma que puedan acceder a este subsidio unos "114.000 desempleados", que se sumarán a los 250.000 beneficiarios actuales.

Pero el Gobierno no sólo va a aumentar la cantidad que se destinará al desempleo. En el proyecto presupuestario se proyecta también un aumento de 269 millones, o de un 4,7%, de la partida para fomentar las políticas activas de empleo, que pasa de los 5.716 millones de 2018 a los 5.985 millones de euros previstos para este 2019.