España crece con "fuerza", pero siguen los retrasos en la cadena de suministro, según el PMI
Las demoras "sin precedentes" de las entregas están impulsando la rápida inflación de los costes
Actualizado : 09:58
El Índice PMI del sector manufacturero español de IHS Markit bajó del nivel 59,5 registrado en agosto al 58,1 en septiembre, pero se situó muy por encima del nivel de ausencia de cambios de 50,0, señalando un "fuerte crecimiento industrial". En septiembre se ha indicado una mejora de las condiciones operativas por octavo mes consecutivo, aunque el ritmo de crecimiento fue el más débil desde abril pasado. El dato estuvo ligeramente por debajo de la previsión del consenso de 58,2.
El sector manufacturero de España experimentó otro mes de "fuerte crecimiento" en septiembre, respaldado por un intenso aumento de la producción y de los nuevos pedidos. "Se siguieron creando puestos de trabajo a medida que persistieron las limitaciones de la capacidad, mientras que el optimismo sobre el futuro mejoró hasta su máxima de tres meses", explican desde IHS Markit.
No obstante, las demoras "severas y sin precedentes" de las entregas, que han impulsado la rápida inflación de los costes en el sector, no mostraron signos de disiparse y restringieron el crecimiento en general. "Se registró un deterioro casi récord en los plazos de entrega de los proveedores, mientras que los precios de los insumos volvieron a subir a una tasa notablemente elevada", añade IHS.
"La economía del sector manufacturero de España continúa expandiéndose con fuerza, registrando otro mes de incrementos históricamente marcados de la producción y los nuevos pedidos a medida que se mantiene la fortaleza de la demanda en los mercados nacionales e internacionales", explica Paul Smith, director económico de IHS Markit.
"No obstante, el crecimiento se ve claramente restringido por los retrasos severos y continuos por el lado de la oferta, que muestran pocas señales de disiparse. Esto en parte refleja una fuerte actividad de compra, impulsada en parte por los esfuerzos racionales de aumentar los stocks y mitigar los mismos desafíos que las empresas están tratando de superar", añade.
"El impacto se sigue observando claramente en los datos de los precios, ya que la inflación de los costes se está acelerando de nuevo hasta niveles récord y las empresas están más que dispuestas a aprovechar la fuerte demanda de ventas para aumentar sus tarifas respectivamente", concluye.