El ethereum toma el testigo del bitcoin y se encamina a los 1.000 dólares

A menos de dos semanas para rubricar 2017, el mercado de las criptomonedas parece dispuesto a seguir haciendo historia. El estratosférico auge del bitcoin ha sido, sin duda, uno de los temas de este año y apunta maneras para seguir dominando las conversaciones financieras en los meses venideros. Pero no estará solo. El Ethereum, que en prácticamente 10 días ha doblado su precio hasta un hito en casi 850 dólares, tiene ganas de competir con el bitcoin y alcanzar los 1.000 dólares antes del 31 de diciembre.

Con el último máximo alcanzado este 19 de diciembre, gracias a un impulso de más de un 17% en las últimas 24 horas, la segunda moneda de cifrado por capitalización de mercado acumula una alucinante apreciación de un 10.270%, desde los 8 dólares con los arrancaba en enero.

Pero no es el único activo virtual de récord. La foto del top 10 de divisas de cifrado a estas horas deja subidas de doble dígito en casi todas ellas. El bitcoin cash se dispara casi un 20%, hasta 2.650 dólares, el dash supera los 1.230 dólares, el litecoin se prepara para asaltar los 400 dólares y el ripple, el cardano o la IOTA siguen acaparando inversiones, mientras el NEM ha vuelto a la lista de honor de CoinMarketCap y se dispara casi un 50%.

El bitcoin corrige moderadamente e intenta hallar estabilidad entre los 18.500 y los 19.000 dólares, después de rozar la barrera de los 20.000 dólares en la madrugada del lunes. La reina de las criptodivisas prolongó su tremenda figura alcista después del debut de los futuros del Chicago Mercantile Exchange (CME) que abrieron por encima de 20.000 dólares, aunque para todos los vencimientos ha corregido hasta precios alrededor de los 19.500 dólares.

Los recientes movimientos de este floreciente mercado han elevado el acumulado de los más de 1.300 tokens digitales existentes por encima de los 600.000 dólares. Hasta 635.000,más concretamente, alcanzados pocos días después de rebasar la línea roja de los 500.000 dólares, la meta a partir de la que los expertos consideran que los bancos centrales van a empezar a tomarse en serio este mercado.

MÁS ABIERTOS A REGULAR QUE A ACEPTAR

Y lo hacen, por ahora, más inclinados a regular e imponer normas que sujeten estos activos, al menos para evitar el blanqueo de capitales, que para empezar a acumular bitcoins y criptodivisas.

Tras las palabras del miembro del Banco Central Europeo, Ewald Nowotny, durante la comparecencia ante los medios del mes de diciembre, que pasó la pelota de proponer una reglamentación comunitaria sobre el bitcoin que casara con la existente en la Unión Europea (UE) sobre lavado de dinero y pagos instantáneos, los ‘Veintisiete’ han tomado cartas en el asunto.

18 meses se han dado para que la nueva directiva comunitaria surgida de la cumbre del 15 de diciembre sobre las plataformas de intercambio de criptomonedas se incluya en la legislación de cada uno de los estados miembros. Entretanto, los países han alcanzado un acuerdo marco para perseguir los crímenes financieros y la evasión de impuestos que coloca el bitcoin en el centro de las nuevas directrices.

Así, el acuerdo dibuja normas más estrictas para prevenir el blanqueo de capitales y el financiamiento del terrorismo con el bitcoin y las altcoins, bajo el amparo del anonimato que ofrecen, hasta ahora, las casas de comercio de monedas virtuales. Tanto estas plataformas como los proveedores de ‘monederos’ para las divisas virtuales deberán identificar a sus usuarios, según las nuevas reglas que ahora deben ser formalmente adoptadas por los estados de la UE y los legisladores europeos en el plazo de un año y medio.