Economía.- La OCDE pide mejorar la calidad del empleo y no apostar exclusivamente por la flexibilidad
PARÍS, 4 (EUROPA PRESS)
La apuesta por la flexibilidad del mercado laboral, necesaria para estimular la creación de puestos de trabajo, tiene que dejar de ser la única estrategia de los gobiernos, que deberán buscar también una mejora de la calidad e inclusividad del empleo en un contexto marcado por los rápidos cambios del entorno a raíz de los progresos tecnológicos, según ha señalado la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
La organización con sede en París ha señalado durante la presentación de su nueva estrategia para el empleo que las evidencias revelan que aquellos países que apuestan por la cantidad, pero también por la calidad y la inclusividad del mercado laboral, como Dinamarca, Suecia o Islandia, logran mejores resultados que los que apuestan de manera predominante por la flexibilidad del mercado.
En este sentido, la OCDE ha afirmado que, a pesar de que la flexibilidad y la adaptabilidad resultan "esenciales" para impulsar la creación de puestos de trabajo en un entorno cada vez más dinámico, los beneficios y costes "deben compartirse de forma justa entre empresas y trabajadores".
"Los países deben redoblar sus esfuerzos para adaptar sus políticas e instituciones a los retos de un mundo laboral que cambia cada vez con mayor rapidez", ha declarado el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, durante la presentación de la nueva estrategia, añadiendo que "el progreso tecnológico, la globalización y el cambio demográfico están generando nuevas oportunidades, pero no para todos".
"Las autoridades deberían centrarse en ayudar a aquellos en riesgo de quedarse atrás mediante formación y políticas educativas bien orientadas, así como políticas sociales y laborales que formen parte de estrategias inclusivas de empleo para ayudar a todo el mundo a salir adelante", ha añadido.
De este modo, la institución señala que, si en los años 90 hacía hincapié en la flexibilidad con el objetivo de combatir los elevados niveles de paro, la nueva estrategia proporciona un marco "no solo para la creación de más, sino también de mejores empleos".
Así, la organización plantea la importancia de cambiar el énfasis desde las políticas correctoras hacia las preventivas, que podrían impulsar la eficacia y la equidad, con el fin de mejorar la protección de los trabajadores más que la de los empleos.
EDUCACIÓN Y FORMACIÓN.
En este sentido, la nueva estrategia de la institución parisina hace hincapié en la necesidad de apostar por la educación y la formación, que permita a los trabajadores adquirir las destrezas demandadas por los empresarios y ofrece incentivos para extender la formación a toda la vida laboral.
Por otro lado, ante el incremento de modalidades de trabajo no convencionales, incluyendo empleos temporales y autoempleo, la OCDE demanda a los gobiernos que se garantice a todos el acceso a las redes de protección social, independientemente del tipo de empleo o contrato, mejorando la eficacia de estas, ampliando su cobertura y adaptando o creando planes específicos, además de impulsar la portabilidad de prestaciones.
Asimismo, la organización señala la necesidad de reforzar la igualdad de oportunidades y apunta la importancia de adaptar las condiciones de trabajo de manera que se facilite a las personas combinar sus responsabilidades laborales, familiares y sociales, lo que permitiría aumentar la participación de hombres y mujeres en el mercado laboral, recortando la brecha salarial de género y reduciendo el riesgo de pobreza y exclusión.