"Nos dirigimos a la catástrofe climática", afirma el secretario general de la ONU
Guterres ha valorado también lo que la invasión rusa de Ucrania supone para la agenda climática
António Guterres, secretario general de la ONU, ha afirmado este lunes de forma severa que el mundo "se acerca a una catástrofe climática", asegurando que la dependencia de los combustibles fósiles tiene a las potencias "con los ojos cerrados", en una entrevista concedida al 'The Economist'.
El mandatario ha dejado ver que aunque la COP26 se había percatado de numerosos avances en términos de conservación que se estaban dando, como la lucha intensificada contra la deforestación o la reducción de las emisiones de gas metano, sólo se había hecho parte del camino, quedando aún numerosos desafías por afrontar.
Tomando por referencia los Acuerdos de París de 2015, en los que se limitó "a muy por debajo de 2, preferiblemente a 1,5 grados centígrados" la temperatura máxima que podría sufrir el planeta por el cambio climático debido a la acción del hombre, el portugués ha afirmado que "mantener vivo ese 1,5 requiere una reducción del 45% de las emisiones globales actuales para 2030, y la neutralidad de carbono para mediados de este siglo".
Sobre esto, y sabiendo que dichos acuerdos se firmaron hace seis años, ha querido puntualizar que “ese problema no se resolvió en Glasgow" y que "de hecho, el problema está empeorando".
LA GUERRA DE UCRANIA EMPEORA AÚN MÁS LA SITUACIÓN
El máximo mandatario de la Organización de las Naciones Unidas tampoco escatimo en palabras a la hora de referirse a la catástrofe que va a producir la invasión rusa de Ucrania y el conflicto generado, asumiendo el caos ya presente en los mercados mundiales de alimentos, con las numerosas implicaciones que para la agenda climática mundial suponen.
Además, la actual situación de búsqueda de alternativas al gas ruso por parte de las principales potencias de la OTAN ha llevado a Guterres a afirmar que esa estrategia de buscar una alternativa similar a la rusa, con combustibles fósiles "puede provocar a corto plazo" que se genere una "dependencia más extendida en el tiempo de los combustibles fósiles y cerrar la ventana a 1,5 grados".