La desaceleración del sector manufacturero de la zona euro se profundiza en diciembre
Después de haber registrado en noviembre máximos de tres meses, según el PMI
Actualizado : 10:34
El sector manufacturero de la zona euro perdió impulso en diciembre después de haber alcanzado máximos de tres meses en noviembre. Además, continúa la debilidad subyacente en el comportamiento del sector, sin cambios frente a los mínimos de casi siete años observados en el trimestre anterior.
El índice PMI del sector manufacturero, elaborado por la consultora Markit y publicado este jueves, registró en el último mes del año el nivel de 46,3, cayendo frente al de 46,9 alcanzado en noviembre, pero situándose ligeramente por encima de su lectura precedente de 45.9. Se mantiene así por debajo del nivel de ausencia de cambios de 50 por undécimo mes consecutivo.
El bajo rendimiento del sector manufacturero se centró en los sectores de bienes intermedios y bienes de capital, y sus respectivos índices PMI se mantuvieron bastante inmersos en territorio negativo. Por el contrario, la categoría de bienes de consumo registró un crecimiento marginal por primera vez desde agosto pasado.
Tanto la producción como los nuevos pedidos continuaron disminuyendo fuertemente en diciembre. Los últimos datos mostraron que la producción cayó por undécimo mes consecutivo y a un ritmo que coincidió con el récord de 81 meses observado en septiembre pasado. Los niveles de nuevos pedidos recibidos también disminuyeron a un ritmo más fuerte. No obstante, los nuevos pedidos de exportación* registraron la reducción más débil desde el comienzo del año.
Tanto la producción como los nuevos pedidos continuaron disminuyendo fuertemente en diciembre
Los fabricantes de nuevo pudieron poner al día gran parte de sus cargas de trabajo debido a esta continuada caída de los nuevos pedidos. Los pedidos pendientes de realización disminuyeron por decimosexto mes consecutivo y a un ritmo más rápido que en noviembre. En consecuencia, el exceso de capacidad afectó el nivel de empleo, que disminuyó en diciembre por octavo mes consecutivo. De hecho, la tasa de pérdida de empleo fue la más alta registrada por la encuesta desde comienzos de 2013.
Se observaron nuevas evidencias de retracción industrial en general a través de los datos de las compras y de los inventarios. Los plazos de espera de los proveedores se han acortado por diez meses consecutivos. Destacando nuevamente el exceso de oferta, se observó una nueva reducción de los precios de los insumos por séptimo mes consecutivo. La tasa de deflación, aunque fue la más débil desde septiembre pasado, se mantuvo marcada y proporcionó más margen para que los fabricantes redujeran sus tarifas. Los últimos datos indicaron que los precios cobrados disminuyeron de nuevo en diciembre, como lo han hecho ininterrumpidamente desde julio pasado.
Por zonas, hubo una moderación generalizada, y siete de los ocho países cubiertos por el estudio registraron unas lecturas del PMI más débiles en comparación con noviembre (la excepción fue Austria, donde no hubo cambios). Alemania fue nuevamente el país que registró el peor resultado, mientras que los declives observados en Italia y los Países Bajos fueron los más fuertes en más de seis años y medio. Por el contrario, el ritmo de crecimiento se mantuvo sólido en Grecia, y Francia indicó un leve incremento. De acuerdo con las tendencias recientes, la destrucción de empleo se mantuvo centrada en Alemania. Por el contrario, Grecia experimentó un fuerte crecimiento de la dotación de personal y Francia fue el único otro país que no registró una contracción del empleo durante el mes.
"Los fabricantes de la zona euro experimentaron un terrible final de 2019, con una tasa de caída de la producción que no se excedió desde 2012", comentan desde Markit, que añaden que "aunque las empresas recuperaron algo de optimismo con respecto a la producción en el plazo de doce meses, el retorno al crecimiento sigue estando bastante lejos".
"Solo el sector de la economía familiar proporcionó una leve mejora de la demanda en diciembre, destacando el hecho de que el sector de consumo ha ayudado a mantener la economía fuera de la recesión en los últimos meses. La capacidad de la economía en general de evitar caer en una contracción frente a una desaceleración manufacturera tan abrupta sigue siendo un desafío clave para la zona euro a medida que avanzamos hacia 2020", destacan.