Correos inicia una huelga contra la directiva y la gestión de transición en el servicio postal
La primera jornada de paros ha contado con cerca de 7.000 empleados
Cerca de 7.000 empleados de Correos han acudido al primero de los tres paros convocados para protestar en contra de la directiva y su forma de gestionar la transición en el servicio postal, según cifras facilitadas por los sindicatos.
Los sindicatos de UGT, CC.OO. y CSIF habían avisado de un posible parón el pasado 22 y 23 de diciembre. Finalmente, la huelga quedó desconvocada para evaluar las negociaciones con Juan Manuel Serrano, director de la entidad pública. Sin embargo, cinco meses más tarde, CC.OO y UGT han establecido tres jornadas de huelga con un seguimiento inicial del 80% de la plantilla de noche y el 90% en el matinal, según los datos publicados.
Por su parte, la “marea amarilla” en Madrid ha contado con la presencia de alrededor de 7.000 empleados de la empresa llegados desde diferentes partes el país, según han indicado los sindicatos. La movilización ha concluido en los aledaños del Congreso de los Diputados, con unas camisetas corporativas donde se podían leer lemas como “stop al desguace, por la viabilidad del correo público” o “salvemos al servicio postal”, según las imágenes publicadas.
"Desde hace cuatro años, Correos ha sido desmantelada, la mayoría de los profesionales han sido fumigados y, sobre todo, se ha llevado a la plantilla a una desmoralización histórica" ha indicado el secretario del sector Postal de UGT, José Manuel Sayagués.
Por su parte, los autobuses que han llegado a la capital tiene como objetivo reivindicar un servicio postal “útil, público y con planes que afronten con eficacia el desafío” del descenso de la carta postal y del incremento del comercio electrónico y la paquetería. "La reforma del correo es un modelo país y no se puede abordar como si fuera una empresa convencional", ha señalado Sayagués.
Por su parte, Regino Martín, portavoz de CC.OO. de Correos, ha indicado estar "en contra del desmantelamiento del correo público porque la ciudadanía no se merece eso, sino que el Gobierno se arremangue, que discuta el modelo postal de este país según lo que necesita y consensúe, no una reconversión, sino una reforma, y un plan estratégico que genere actividad y empleo".