¿Comprar o alquilar en 2023? Estabilidad en los precios y caída del volumen de hipotecas
El factor que marcará la evolución del mercado del alquiler será la falta de oferta disponible
Actualizado : 10:33
Este año que está a punto de acabarse ha marcado lo que sin duda parece un cambio de ciclo en el mercado inmobiliario. Aunque los datos de cierre de 2022 son muy positivos, ya se empiezan a apreciar ciertas inercias de relajación en las tendencias que pronostican un 2023 más moderado. ¿Qué deparará el nuevo año para el mercado de venta y de alquiler?
La agenda del mercado de compraventa en 2023 estará fijada en la financiación. "La subida de tipos del Banco Central Europeo (BCE), el rápido encarecimiento que ha sufrido el euríbor, el coste de financiación de los bancos a largo plazo en los últimos meses y su impacto entre los nuevos y antiguos hipotecados tendrá una influencia decisiva en el comportamiento del sector durante el próximo año", señalan desde Idealistas.
Mientras, el factor que marcará la evolución del mercado del alquiler durante 2023 será sin duda la falta de oferta disponible.
En cuanto a las compraventas, desde el portal inmobiliario estiman que para 2023 habrá una caída del volumen de transacciones hipotecarias para compra de vivienda respecto a este año, aunque seguramente sigamos viendo un fuerte dinamismo en el cambio de hipotecas variables a fijas (vía subrogación o cancelación y apertura de un nuevo préstamo), lo cual amortiguará el impacto.
"Y aunque las condiciones de las hipotecas fijas se han encarecido mucho, han irrumpido con fuerza las hipotecas mixtas, con condiciones más ventajosas y que están ganando terreno y creemos seguirán siendo una de las mejores alternativas para los consumidores durante el año que viene", dicen.
Donde el cambio será más notable es en el número de compraventas de viviendas que se cerrarán en 2023, donde posiblemente veamos una reducción del número de operaciones a nivel nacional y un estancamiento en los mercados más dinámicos. 2022 ha sido el mejor año en lo que a compraventas se refiere desde el estallido de la burbuja inmobiliaria y acabará con más de 600.000 viviendas vendidas. "Es posible que en 2023 el sector comience a volver al entorno de las 500.000 viviendas vendidas en un año", calculan.
La oferta disponible de viviendas en venta en el mercado se estabilizará, tras caer un 7% en el último año. Los tiempos de comercialización muy posiblemente se alargarán y los compradores volverán a tener opciones entre las que elegir. Creen que no será un proceso homogéneo y las zonas con menos demanda lo notarán antes y con más fuerza.
Por último, consideran poco probable que asistamos a caídas de precio generalizadas en los grandes mercados durante los próximos meses, probablemente los precios se enfriarán y tomarán una senda estable.
Por su parte, en el mercado del alquiler, destacan que mientras la demanda no deja de crecer, la oferta de vivienda se va drenando sin que se produzca una reposición de las viviendas que terminan sus contratos.
Opinan que nada hace pensar que esta tendencia en la disminución de oferta de viviendas disponibles vaya a revertirse en los próximos meses, aunque un pronóstico optimista podría hablar de un freno a la sangría actual. "La actual incertidumbre económica que atravesamos podría retrasar de alguna manera la toma de decisiones por parte de los potenciales inquilinos, lo que prolongaría la permanencia de las viviendas en el mercado", afirman.
Además, la escasez de vivienda dificulta el acceso a las familias más desfavorecidas y a nuevos colectivos sin problemas económicos pero que ofrecen una menor seguridad a los propietarios, como autónomos o personas solas. "En muchos mercados se normalizarán los procesos de ‘casting’".