¿Bajará el BCE los tipos hasta el 1,5% en 2025 tras los últimos datos de la eurozona?
El mercado contempla la posibilidad de un recorte de 50 puntos básicos en la reunión de diciembre
Datos de crecimiento, inflación, índices PMI... ¿Cómo afectarán a las decisiones de política monetaria que tendrá que tomar el Banco Central Europeo (BCE) los próximos meses? El mercado contempla la posibilidad de un recorte de tipos de 50 puntos básicos en la reunión de diciembre y algunos analistas plantean que los tipos pueden recortarse hasta alcanzar el 1,5% de cara a la segunda mitad de 2025.
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La inflación de la eurozona repunta al 2% en octubre por los servicios y los alimentos
En octubre, impulsada por la energía y los alimentos, la inflación de la eurozona volvió a repuntar, subiendo tres décimas, hasta el 2%. El coste de los alimentos frescos aumentó un 3%, frente a la subida del 1,6% del mes anterior, mientras que el precio de la energía se redujo un 4,6% frente a la bajada del 6,1% registrada en el mes previo.
"Se produce un intermitente y la dinámica de la inflación sigue siendo la misma que vimos en los primeros meses del tercer trimestre, es decir, con un impulso de la inflación subyacente que avanza lentamente en la dirección correcta", señalan en Danske Bank.
Para Oxford Economics, estos datos subrayan la escasa desinflación de los servicios hasta la fecha. El crecimiento anual de los precios se mantuvo estable en el 3,9% en octubre, prácticamente sin cambios desde noviembre de 2023. "Se necesitarán más descensos en la inflación de los servicios para que la inflación básica baje", dicen.
"Después del rápido descenso en septiembre, esto nos da una idea realista del proceso desinflacionario de la eurozona", añaden en ING.
En su opinión, la demanda se mantiene baja, "lo que debería ayudar a reducir la inflación, incluida la subyacente, al objetivo en 2025. Aun así, los riesgos al alza para las perspectivas siguen existiendo, ya que las presiones del mercado laboral aún no se han disipado y el crecimiento salarial sigue siendo elevado por ahora".
A esto se suma que, en el tercer trimestre, la economía de la zona euro creció más de lo previsto. El Producto Interior Bruto (PIB) avanzó entre julio y septiembre un 0,4% en comparación con el trimestre anterior.
"El PIB de la zona euro superó las expectativas, impulsado por el sólido sector de servicios de España. El crecimiento también se vio respaldado por un impulso olímpico en Francia, mientras que Alemania mostró un repunte modesto. Sin los Juegos Olímpicos y la revisión del segundo trimestre, la actividad francesa y alemana se habría estancado, lo que subraya cómo las dos economías más grandes luchan mientras el sur de Europa florece", comentan en Danske Bank.
Si bien el crecimiento del PIB en el tercer trimestre fue superior a las proyecciones del personal técnico del BCE de septiembre, que esperaban un 0,2%, "las perspectivas de crecimiento siguen siendo frágiles", añaden.
Con el riesgo de que el crecimiento por debajo del potencial continúe en 2025 y la inflación rondando el objetivo del 2%, "vemos la necesidad de que el BCE recorte los tipos antes de lo esperado respaldaría el crecimiento en 2025. Por lo tanto, hemos ajustado nuestras perspectivas del BCE, esperando ahora que reduzca los tipos en 25 puntos básicos en cada reunión hasta el verano de 2025, llevando el tipo terminal al 1,5% en septiembre de 2025".
En su caso, creen que no se puede descartar el riesgo a la baja de 50 puntos básicos en diciembre. "No creemos que las cifras del PIB de la eurozona hayan sido tan alentadoras como sugería el crecimiento general", aseguran desde Oxford Economics, que creen que "no hay que dejarse llevar por el repunte del crecimiento en el tercer trimestre".
Ven señales de que los inversores se han vuelto demasiado optimistas sobre las posibilidades de un recorte de los tipos de interés de 50 puntos básicos en diciembre. "Todavía esperamos 25 puntos básicos", matizan.
Para ING, el panorama es difuso: "La dirección de los datos entrantes en la región no está del todo clara, lo que proporciona al BCE señales confusas sobre la trayectoria de los recortes de tipos".