Aumenta el esfuerzo para comprar o alquilar una vivienda en el cierre de 2023
La escasez de oferta y el aumento de los precios son los principales responsables
La proporción de los ingresos familiares necesarios para acceder a una vivienda experimentó un aumento alcanzando el 22% para la compra y el 33% para el alquiler en el último año, según un informe publicado por idealista basado en los datos del cuarto trimestre de 2023.
La escasez de oferta y el consecuente aumento de los precios son responsables de que el esfuerzo requerido para el alquiler haya llegado al máximo recomendado por los expertos, con un incremento de tres puntos en el último año. El encarecimiento de la financiación parece ser el factor que ha llevado a las familias que adquieren una vivienda a destinar ahora el 22% de sus ingresos, en comparación con el 18% en diciembre de 2022.
“Las razones del incremento del esfuerzo en compra y en alquiler son diferentes. La subida de los costes de financiación es el principal motivo en el caso de las viviendas en venta, mientras que la subida de precios provocada por la constante reducción de oferta explica el incremento del esfuerzo en alquiler". Ha señalado Francisco Iñareta, portavoz de Idealista.
Asimismo, recalca que "las perspectivas en el caso del alquiler son negativas, no solo en lo referente al precio sino que de mantenerse (o endurecerse como en el caso de Cataluña) las políticas de vivienda no se conseguirá revertir el proceso de pérdida de oferta, lo que aumentará las dificultades de las familias para acceder a una vivienda en alquiler, con especial incidencia en los perfiles más vulnerables. En el caso de la compra de vivienda, es posible que la anunciada reducción de tipos del BCE en el tercer trimestre de este año consiga abaratar ligeramente el coste de financiación, lo que supondría una reducción del esfuerzo si no se incrementa con fuerza la demanda y tensiona al alza los precios”.
ESFUERZO PARA ALQUILAR POR CIUDADES
Barcelona es la que mayor porcentaje de los ingresos del hogar exige (44%), seguida por Palma (43%), Valencia (39%), Málaga (38%), Madrid (37%), Alicante (35%), así como en San Sebastián (33%), Las Palmas de Gran Canaria (32%), Bilbao (30%) y Segovia (30%). Por debajo de estas cifras encontramos a Sevilla (29%), Santa Cruz de Tenerife (29%), Girona (28%), Vitoria (28%), Cádiz (27%) y Granada (27%). Por el contrario, el menor esfuerzo se pide en Ciudad Real (16%), Teruel (17%), Palencia (18%), Zamora, Jaén y Cáceres (19% en los 3 casos).
Palma es la ciudad en la que el esfuerzo para alquilar más ha crecido, ya que se ha incrementado en 10 puntos. Le sigue Valencia (8 puntos), Segovia (7 puntos), Las Palmas de Gran Canaria, Barcelona y Madrid (6 puntos en las 3 ciudades). Con un incremento de 5 puntos de esfuerzo están Girona, Málaga y Alicante, mientras que en San Sebastián ha crecido en 4 puntos.
Ninguna capital ha reducido el nivel de exigencia para el alquiler y solo en 5 casos se ha mantenido igual que el pasado año: Melilla, Ávila, Valladolid, León y Albacete. La provincia de Málaga es la que exige un mayor esfuerzo para alquilar una vivienda a los locales, ya que alcanza el 53% de los ingresos familiares. Le siguen Baleares (48%), Barcelona (41%), Las Palmas (37%), Santa Cruz de Tenerife, Alicante y Guipúzcoa (35% en los 3 casos). En Madrid y Valencia la tasa se sitúa en el 34%, mientras que en Sevilla está en el 31%: Teruel (16%), Palencia y Ciudad Real (18% en ambas provincias) son las 3 en las que se exige un menor esfuerzo.