La actividad empresarial de la zona euro se contrae por segundo mes consecutivo

El índice PMI revela que la situación ha sido particularmente marcada en Alemania

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Bolsamania | 05 sep, 2022

Actualizado : 11:09

Los últimos datos del índice PMI revelan que la economía del sector privado de la zona euro se adentró aún más en territorio de contracción en agosto, ya que el sector servicios siguió la tendencia del sector manufacturero al registrar una caída de la actividad durante el octavo mes del año. Así lo apuntan los datos facilitados por S&P Global, que remarca que la situación ha sido "particularmente marcada en Alemania".

"La debilidad en general de la actividad total reflejó la caída de la demanda, y a su vez, los nuevos pedidos también disminuyeron a un ritmo más rápido a mediados del tercer trimestre. El empleo siguió aumentando, pero la tasa de creación de puestos de trabajo se atenuó en medio de una menor carga de trabajo y un debilitamiento de la confianza empresarial", explica el informe del PMI de la Eurozona.

También indica que las tasas de inflación tanto de los precios pagados como de los precios cobrados, "a pesar de mantenerse elevadas, continuaron atenuándose, brindando un cierto respiro a las empresas".

El Índice PMI compuesto de la zona euro se situó, en la lectura final, por debajo del nivel de ausencia de cambios de 50.0 por segundo mes consecutivo en agosto, cayendo a 48.9 desde el 49.9 registrado en julio. "El ritmo de contracción señalado en el último período de la encuesta, aunque aún modesto, fue más pronunciado que el observado en julio", apunta S&P Global.

"La reducción en general de la actividad total reflejó el declive de la producción manufacturera y de la actividad del sector servicios en agosto, ya que la actividad del sector servicios se situó en territorio de contracción por primera vez desde marzo de 2021. No obstante, la reducción de la actividad en las empresas de servicios fue solo marginal y mucho más débil que la observada en el sector manufacturero, donde la producción volvió a caer fuertemente", registrando contracción por tercer mes consecutivo.

La caída de la actividad fue en gran parte debido al empeoramiento del entorno de la demanda, ya que las fuertes presiones inflacionistas y la consiguiente preocupación por el coste de vida hicieron que los clientes aplazaran sus decisiones de compra.

Los datos del índice PMI a nivel nacional señalaron que Alemania fue el principal impulsor del declive en general de la actividad empresarial de la zona euro, ya que la actividad total se contrajo a un ritmo sólido, que fue el más pronunciado desde la ola inicial de la pandemia de Covid-19. Italia fue el otro país que experimentó una contracción de la actividad a nivel compuesto, cuya actividad total se contrajo por segundo mes consecutivo, aunque a un ritmo leve, en agosto. Aunque la actividad total siguió aumentando en Francia, España e Irlanda, los ritmos de expansión fueron solo modestos y se ralentizaron hasta sus niveles más bajos en diecisiete, siete y dieciocho meses respectivamente.

El PMI destaca también que los nuevos pedidos de la zona euro "disminuyeron por segundo mes consecutivo en agosto, y a un ritmo más pronunciado que fue el más fuerte desde noviembre de 2020". Tal y como ha ocurrido con la actividad total, los dos sectores estudiados registraron un declive de los nuevos pedidos, y los fabricantes experimentaron una contracción más pronunciada. La demanda internacional también se mantuvo bajo presión, y los nuevos pedidos de exportación disminuyeron por sexto mes consecutivo. De hecho, "la caída de los nuevos pedidos procedentes del extranjero fue más rápida que la observada para los nuevos pedidos en total".

A pesar de los declives observados en la actividad total y los nuevos pedidos, las empresas de la zona euro volvieron a aumentar su fuerza laboral a mediados del tercer trimestre, lo que refleja en gran medida los esfuerzos continuos por reconstruir la capacidad después de la pandemia. Se observó un aumento del empleo en todos los países estudiados. No obstante, la tasa general de creación de empleo se atenuó por tercer mes consecutivo en medio de un entorno débil de demanda. Asimismo el último aumento de los niveles de personal fue el más lento desde marzo de 2021.

El aumento del empleo junto con la disminución de los nuevos pedidos hicieron que las empresas pudieran mantener al día las cargas de trabajo y, como resultado, los pedidos pendientes de realización disminuyeron por segundo mes consecutivo.

La tasa de inflación de los precios de los insumos continuó moderándose desde el récord de la serie registrado en marzo pasado, alcanzando la tasa más lenta en casi un año en agosto. No obstante, los precios de los insumos continuaron aumentando a una tasa sin precedentes antes del pico actual de inflación desde que comenzó la serie en 1998. De manera similar, los precios cobrados aumentaron a una tasa más débil, pero que fue una de las más pronunciadas registradas por el estudio. Se observaron tendencias de precios similares en los dos sectores estudiados.

Las expectativas de actividad comercial se mantuvieron históricamente bajas, a pesar de experimentarse una ligera mejora en el sentimiento desde julio. Se observó una renovada perspectiva positiva en la industria manufacturera en comparación con la confianza empresarial en el sector servicios, que indicó su nivel más bajo desde octubre de 2020.

Según Chris Williamson, Chief Business Economist de S&P Global Market Intelligence, "un segundo mes de deterioro de las condiciones empresariales en la zona euro aumenta la posibilidad de que el PIB se contraiga en el tercer trimestre. En agosto, la actividad total cayó a un ritmo acelerado, y las empresas y los hogares redujeron sus gastos en medio del reciente aumento de la inflación y la creciente incertidumbre sobre las perspectivas económicas".

En opinión del experto, "aunque el ritmo de declive en general sigue siendo modesto, proporcional a una caída del PIB a una tasa trimestral de solo el 0.1 %, los últimos datos apuntan a que la economía atraviesa su período más débil en nueve años, excluyendo las desaceleraciones observadas durante el punto álgido de la pandemia".

Por su parte, desde Oxford Economics destacan que el dato de 48,9 indica que la actividad del sector privado de la eurozona se contrajo modestamente en agosto, aunque "un poco más de lo que se había informado inicialmente, ya que la lectura flash del PMI se situó en 49,2". Como dicen los analistas de la firma británica, "hay varios elementos dentro de los PMI que apuntan a un mayor empeoramiento en los próximos meses, incluyendo las caídas generalizadas de los flujos de nuevas empresas y unas expectativas anuales muy apagadas".

En Pantheon Macroeconomics también han valorado los datos, y apuntan que después de que la actividad haya caído "más rápido de lo que se pensaba en agosto" esperan "una recesión en el segundo semestre". "La demanda de servicios se está ralentizando considerablemente, ya que la elevada inflación está estrangulando la demanda, lo que acorta el repunte de los servicios", destacan los expertos de esta firma, y apuntan que "el PMI compuesto de la zona euro en agosto es coherente con la caída del PIB de entre el 0,5% y el 1% a mediados del tercer trimestre", por lo que creen que la economía de la zona euro "se encamina hacia una recesión técnica en el cuarto trimestre".

Las cifras de Alemania, como ha dicho S&P Global, han sido claves. En la mayor economía europea la lectura final del índice compuesto ha sido de 46,9, por debajo de su estimación previa de 47,6, lo que lo sitúa en su nivel más bajo en 26 meses. Tanto la actividad manufacturera como la de servicios germanas cayeron más rápido de lo que se pensaba.

Y en Francia se ha dado el caso contrario. El PMI compuesto de agosto se revisó al alza, hasta el 50,4, desde su estimación previa de 49,8, pero sigue estando por debajo del 51,7 de julio.

FRENO AL CRECIMIENTO DE LA ACTIVIDAD EN EL SECTOR SERVICIOS

Los datos del PMI compuesto se conocen tras haberse publicado el Índice PMI de Actividad Comercial del Sector Servicios de la zona euro, que ha caído por debajo de la lectura de ausencia de cambios de 50.0 en agosto, poniendo fin a una secuencia de dieciséis meses de crecimiento de la actividad de este sector. El índice descendió a 49.8, frente a 51.2 registrado en julio, y señaló un leve declive de la actividad en agosto.

La renovada contracción de la actividad comercial reflejó nuevos indicios de debilidad de la demanda puesto que los nuevos pedidos se redujeron por segundo mes consecutivo. "El ritmo de declive de los nuevos pedidos fue modesto, pero se ha acelerado hasta su máxima desde febrero de 2021", comenta S&P Global.

El entorno de debilitamiento de la demanda también afectó la confianza entre las firmas con respecto a las perspectivas de actividad comercial para los próximos doce meses. El optimismo se redujo por cuarto mes consecutivo en agosto, y fue el más bajo desde octubre de 2020.

Las empresas de servicios de la zona euro continuaron expandiendo sus plantillas, extendiendo la secuencia actual de creación de empleo a diecinueve meses. Pese a ello, la contratación se redujo nuevamente en agosto, y fue la más débil desde mayo de 2021.

Las presiones inflacionistas continuaron atenuándose, pero se mantuvieron elevadas. Tanto los costes de los insumos como los precios de venta aumentaron a ritmos no observados antes de la pandemia, pero a las tasas más lentas de los últimos seis meses.

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