Familia y amigos de Iñigo Cabacas dicen que una sentencia que no implique condena "no será asumible"
Reiteran su exigencia de "justicia y verdad, y otro modelo policial urgentemente" para que "no vuelva a ocurrir" lo sucedido a Iñigo
BILBAO, 16 (EUROPA PRESS)
Los padres y amigos de Iñigo Cabacas, que falleció el 9 de abril de 2012, cuatro días después de recibir un pelotazo de goma en una carga policial que realizó la Ertzaintza durante los incidentes tras el partido del Athletic contra el Schalke 04 en Bilbao, han advertido que "una sentencia que no implique una condena no va a ser asumible por la ciudadanía" vasca, han reiterado su exigencia de "justicia, verdad, reconocimiento y reparación", y han reclamado "otro modelo policial urgentemente" para que lo sucedido a Iñigo "no vuelva a ocurrir".
Manu Cabacas y Fina Licerazu, padres de Iñigo Cabacas, han comparecido este viernes en rueda de prensa en Bilbao, acompañados de amigos de su hijo, para valorar el juicio celebrado en la Audiencia de Bizkaia, durante doce días, por la muerte del joven aficionado del Athletic, de la que están acusados seis ertzainas que participaron en el dispositivo policial con motivo del encuentro, tres mandos intermedios y tres agentes de base.
Koldo Rodríguez, amigo de Iñigo Cabacas, ha afirmado que, "una vez visto y oído lo ocurrido en estas últimas semanas", algunos "no han jugado limpio". A su entender, "ha quedado sobradamente demostrado que no hubo una pelea multitudinaria, que cuando llegaron las furgonetas de la Ertzaintza no había pelea alguna, no había heridos y no había agresores, que nadie vio encapuchados, ni piedras y mucho menos jardineras", así como que "los ertzainas dispararon en horizontal".
Además, ha denunciado que la actitud de los ertzainas "tras conocerse que había una persona herida ha sido vergonzosa y humillante", ya que, "incluso llegaron a mofarse del joven que yacía herido en el suelo", y ha señalado que "incluso se impidió que la ambulancia llegase antes".
Así mismo, ha afirmado que los responsables de la Ertzaintza "supieron de inmediato lo que había pasado", por lo que "no es creíble y no se entiende que al llegar al Bunker, la Ertzaintza actuara como si nada hubiese pasado" y su responsable "limpiara todos los lanzapelotas y mezclara todas las pelotas sin hacer recuento alguno", cuando "sabían desde el principio que había un herido muy grave, y sabían, además, que las lesiones eran consecuencia de un pelotazo".
Koldo Rodríguez ha criticado que se prefiera "dar la imagen de desastre organizativo e incompetencia, para esconder la realidad, que no es otra que han obstruido la acción de la justicia".
Por otro lado, ha afirmado que de las comunicaciones escuchadas en el juicio "queda claro que el Ugarteko, que era el jefe de operaciones aquella noche, fue la persona que ordenó entrar con todo y que tuvo mando sobre los demás", aunque ello "no exime de responsabilidad a otros oficiales, que no hicieron nada por evitar que los agentes disparasen o cesasen la carga, e incluso alguno de ellos dio orden de disparar".
"LOCA ACADEMIA DE POLICÍA"
Por su parte, Eneritz Zabala, también amiga de Iñigo Cabacas, ha remarcado que "no ha sido una cuestión de incompetencia". "Han intentado proyectar una imagen peliculera del tipo 'Loca academia de policía', pero no nos la creemos", ha dicho, para asegurar que "se ha buscado ocultar lo que en realidad sucedió ese día".
Tras afirmar que "no es creíble que unas fuerzas policiales no conozcan las consecuencias de un impacto con bala de goma, que no conozcan sus consecuencias mortales", ha denunciado que el esfuerzo de los responsables de la Ertzaintza "ha ido dirigido a ocultar las pruebas para difuminar responsabilidades" y, para ello, "han mentido de una manera consciente desde el primer día".
"Con el objetivo de proteger a sus compañeros, han decidido mentir frente a la justicia y pretendido engañar a toda la sociedad", ha afirmado respecto a los testimonios de los ertzainas, para denunciar que "han tratado a Iñigo y su familia como víctimas de segunda clase" y "el colmo de la indecencia es que han tratado de presentar a los acusados como víctimas de un ataque que no existió y de un juicio injusto", cuando "las únicas víctimas aquí son Iñigo y su familia", pero, "bien lejos del reconocimiento que se les debe a todas la victimas, el juicio ha estado plagado de desprecio y humillación".
"¿Acaso no merecen reconocimiento?", se ha preguntado, para insistir en que "es necesario conocer la verdad, reconocimiento y reparación", por lo que ha advertido de que "una sentencia que no implique una condena no va a ser asumible por la ciudadanía de este país".
Zabala ha acusado a la Ertzaintza de actuar de "manera totalmente prejuiciosa" y ha lamentado que "ése es el modelo policial con el que nos encontramos hoy en día, arrastrado de otro tiempo y el cual no tiene cabida en nuestra sociedad".
"Y no es solo cuestión del modelo policial, pues éste tiene responsables políticos muy claros. El día que hirieron de gravedad a Iñigo los tenía, y hoy los tiene también, y son estos los que parecen premiar, encima, este modelo totalmente caduco", ha denunciado, para demandar "otro modelo policial urgentemente", para que "lo que le sucedió a Iñigo no le vuelva a suceder a nadie".
"TRATO DE FAVOR"
Por último, Manu Cabacas ha denunciado el "evidente trato de favor hacia los imputados por parte tanto del tribunal, como del Gobierno Vasco y de la Fiscalía". Así, ha criticado que "ninguno de los policías acusados ha estado obligado a estar en su propio juicio, excepto el día de su declaración y el último día, una situación totalmente infrecuente, nada habitual".
También ha indicado que, "desde el primer día han estado presentes en la sala varios abogados del Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, que han mantenido una gran sintonía con los abogados de la defensa". "Estos abogados son pagados por nosotros con dinero público. Nuestras abogadas las pagamos nosotros, y a los suyos también nosotros", ha censurado.
Así mismo, ha considerado "el colmo de la desfachatez" que una agente de la Ertzaintza que declaró como testigo de la defensa "haya confesado que en la fase de instrucción se había reunido con mandos y abogados del Gobierno de Lakua para preparar su declaración". "¿Cómo explica esto la consejera de Seguridad?", ha preguntado, para afirmar que "no solo estamos ante un grave hecho procesal, sino que, además, es una gran irresponsabilidad política".
Manu Cabacas ha manifestado que "especialmente doloroso y humillante" ha sido la actuación de la Fiscalía, que "ha mantenido una actitud pasota, con apenas unas preguntas en toda la vista y que al final del juicio pide la absolución de los acusados porque dice que no se puede encausar a nadie porque no se puede determinar qué pelota mató a Iñigo". Esta actuación deja, a su juicio, "un espacio de impunidad enorme a cualquier actuación policial".
En ese sentido, ha señalado que "hay varias sentencias, alguna de ellas del Tribunal Supremo, en las que se expone que es irrelevante determinar quién hizo el disparo, porque se trata de un hecho conjunto, cuya responsabilidad es compartida". Por ello, ha repetido las palabras de su mujer tras finalizar el juicio y solicitar la Fiscalía la absolución: "Nos han humillado y denigrado".