El Ibex 35 cierra con suaves caídas y salva los 9.400 puntos lastrado por Repsol

El Ibex 35 (-0,05%; 9.429 puntos) ha cerrado con suaves pérdidas tras una jornada descafeinada. Este lunes, sin apenas referencias de peso para marcar el devenir del mercado, ha dibujado una jornada de transición (este martes es festivo en España y otros países europeos) y de escasa negociación.

Como factor positivo, el sector bancario ha recuperado posiciones, con Unicaja y Sabadell a la cabeza. Aunque también ha avanzado BBVA, después del susto de la semana pasada, provocado por el impuesto a la banca en Italia.

Sin embargo, las caídas de Fluidra, Repsol, Acciona, ACS o Aena han terminado por afianzarse y han mandado a negativo al selectivo español.

Estamos ya a mediados de agosto, y eso se nota en los mercados, que además se están dejando llevar por el sentimiento de incertidumbre que ha invadido las bolsas asiáticas. Han registrado fuertes pérdidas por la venta masiva que han experimentado los índices chinos, ante el temor a los impagos del sector inmobiliario, tras el desplome de Country Garden, y la debilidad general que está mostrando la economía de China con cada dato que se da a conocer.

Todo esto, apunta Michael Hewson, analista jefe de mercados de CMC Markets UK, "parece traducirse en un comienzo más débil para los mercados europeos".

Por su parte, Ipek Ozkardeskaya, analista senior en Swissquote Bank, comenta que "la semana comienza con mal humor, ya que las preocupaciones inmobiliarias chinas se intensifican con la suspensión por parte de Country Garden de casi una docena de bonos onshore a partir de hoy".

Además, añade, Zhongzhi Enterprise Group, que tiene alrededor de 1 billón de yuanes bajo gestión, incumplió los pagos vinculados a productos emitidos por sus empresas el pasado viernes, "lo que avivó aún más la tensión entre los inversores", que ya esperan las grandes referencias que se conocerán esta semana. Por ejemplo, el PIB de Japón, la inflación de Reino Unido, el PIB de la zona euro, las actas de la Fed, o la inflación de la eurozona.

Precisamente el IPC británico que se publica el miércoles copará la atención, y es que puede ser determinante para saber si habrá o no una nueva subida de los tipos de interés por parte del Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés). "La principal pregunta será cuánto caerá la inflación, ya que el efecto de la reducción del tope del precio de la energía se tendrá en cuenta en las cifras de julio", comenta Hewson.

La expectativa del mercado es que se produzcan al menos otras dos subidas de tipos y que éstos se mantengan elevados durante más de un año. "La perspectiva de otras dos subidas de tipos no es especialmente bienvenida, dadas algunas de las vulnerabilidades subyacentes de la economía británica, con el mercado inmobiliario especialmente vulnerable", resalta el experto de CMC. De hecho, cree que "las críticas justificadas a su gestión de la economía británica en los últimos 18 meses han provocado la sensación de que el Banco de Inglaterra podría sobrecompensar en la otra dirección".

Será a partir de este martes cuando haya algo más de movimiento, precisamente porque se empezarán a conocer las mencionadas referencias macroeconómicas. También en el plano empresarial los inversores estarán pendientes esta semana de las compañías que aún quedan por presentar sus resultados. Son cada vez menos, y en los próximos días dan cuenta de sus cifras compañías como Pandora, Home Depot, Carlsberg, Target o Walmart.

En otros mercados, cabe destacar la subida de la rentabilidad del bono a 10 años del Tesoro estadounidense hasta el 4,174%, mientras que el EUR/USD cae un 0,23% y se cambia a 1,0918.

El bitcoin suma un 0,4%, en los 29.565 dólares, y la onza de oro cede un 0,2%, y se cambia a 1.942 dólares. El petróleo retrocede un 0,5% y el Brent se intercambia a 86,3 dólares.