CoinShares cree que los mineros de Bitcoin cambiarán las criptos por la IA

El cuarto 'halving' del bitcoin (BTC) se ha completado, pero las cosas no parecen haber cambiado demasiado. La criptomoneda reina apenas se ha movido en los últimos días y, de momento, está cumpliendo los pronósticos de los analistas más pesimistas, los cuales esperaban que no se repitieran las fuertes subidas de anteriores ocasiones. No obstante, la reducción a la mitad sí ha tenido sus efectos en el ecosistema Bitcoin en su conjunto y una de las primeras sería empujar definitivamente a las compañías de minería de BTC al negocio de la inteligencia artificial (IA).

Según un informe de CoinShares, grandes compañías mineras como Core Scientific tienen planes para expandir su negocio hacia la IA, mientras otras como Hive o BitDigital ya han conseguido aumentar sus ingresos entre un 2% y un 4% gracias a esta tecnología. En concreto, esta firma de análisis blockchain espera un cambio hacia la IA "en lugares energéticamente seguros debido a su potencial para obtener mayores ingresos".

James Butterfill, director de investigación de CoinShares, destaca que las demandas de energía y tiempo de actividad de Internet entre la computación de IA y la minería de bitcoins varían "significativamente". La primera requiere un tiempo de actividad "extremadamente alto", normalmente del 99% o superior, junto con "sofisticados sistemas de redundancia" y suelen acarrear consigo "importantes penalizaciones contractuales que pueden retrasar la reanudación de actividades de procesamiento anteriores durante un periodo prolongado, lo que limita su idoneidad".

"En cambio, la minería de bitcoins no se enfrenta a estos problemas. Los ASIC, el hardware utilizado para la minería de Bitcoin, pueden encenderse y apagarse en cuestión de minutos y reanudar el procesamiento inmediatamente. Esta flexibilidad los hace ideales para lugares con fuentes de energía menos fiables, como los sitios que utilizan energías renovables o la quema de gas varado, donde los requisitos de tiempo de actividad son flexibles", explica este experto.

Es por ello, señala, que se está dando una "creciente preferencia" por la IA frente a la minería de Bitcoin en estos lugares energéticamente seguros. De cara al futuro, agrega, es "concebible" que la minería de Bitcoin "pase a basarse predominantemente en emplazamientos energéticamente inseguros, especialmente donde pueda subvencionar financieramente dichos proyectos energéticos. Por el contrario, es probable que los mineros que busquen diversificar sus ingresos y obtener márgenes potencialmente mayores inviertan en IA, exacerbando esta divergencia".

Además, Butterfill destaca que los mineros se enfrentarán a aumentos sustanciales de los costes como consecuencia de la reducción a la mitad, ya que los costes de electricidad y de producción en general prácticamente se duplicarán. En este sentido, apunta, las empresas mineras pueden intentar mitigar estos costes más elevados optimizando los costes energéticos, aumentando la eficiencia minera y comprando hardware a mejor precio. Según cálculos de CoinShares, el coste medio de producción de electricidad en el cuarto trimestre fue de aproximadamente 16.300 dólares por bitcoin, que se espera que aumente a unos 34.900 dólares tras la reducción a la mitad.

De igual modo, se espera que el 'hashrate' (potencia computacional combinada para minar y procesar transacciones en la blockchain) podría aumentar hasta 700 exahash en 2025, según las previsiones de CoinShares, pero podría caer un 10% después de la reducción a la mitad a medida que los mineros apaguen las máquinas no rentables. Se espera que los precios caigan tras el evento hasta los 53 dólares/ph/día.

Estas conclusiones no son nuevas. El año pasado, los analistas de Bernstein destacaban que la IA podría ser un buen campo en el que diversificar las operaciones de las compañías mineras, ya que se encontraban en un "juego de supervivencia" en el que solo las empresas más eficientes podrían sobrevivir. Por otro lado, JP Morgan destacaba que la reducción a la mitad traería consigo un período de presión para estas empresas, ya que los costes de producción aumentarían y los ingresos menguarían como consecuencia de la reducción a la mitad de Bitcoin.