CNMV: "Escándalos como el de FTX responden a la falta de control"
Han alertado de que la inversión en algunos ámbitos se ha convertido "en un juego"
La vicepresidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Montserrat Martínez Parera, ha explicado que detrás de muchos de los problemas en el sector de los criptoactivos, como la quiebra de la plataforma FTX, se encuentra la falta de control, por lo que ha vuelto a insistir en que los inversores deben extremar la cautela cuando se aproximan a ámbitos no regulados como los criptoactivos.
En la inauguración del Congreso Asufin 'Consumidores ante la crisis energética y la digitalización', la vicepresidenta de la CNMV ha avisado de que innovación mal utilizada o carente de algunos controles ha llevado a prácticas no deseables.
En este sentido, ha apuntado que la inversión en algunos ámbitos se ha convertido "en un juego". "Utilizamos el término gamificación, pero son técnicas más propias de los videojuegos, en el fondo hay un componente de adicción, y te prometen unas ganancias seguras en muy poco espacio de tiempo: sabemos que eso no se sostiene y lo hemos visto en el ámbito de los criptoactivos", ha alertado.
En este punto, ha señalado que la falta de control está detrás de muchos de los problemas o escándalos que se producen en este sector, como la quiebra de la plataforma de compraventa de criptomonedas y otros activos criptográficos FTX.
En este escenario, ha recalcado la necesidad de contar con unas reglas claras en este ámbito. Mientras no termine de negociarse en Europa el reglamento MiCA, Martínez Parera ha insistido en pedir al inversor "extremar la cautela" cuando se aproxime a ámbitos que no tienen controles y que no están regulados.
"Información no es lo mismo que conocimiento. La información es enorme, pero tenemos que ser capaces de saber diferenciar el grano de la paja. Tenemos que ver cuál es la fiabilidad de esa información y evitar caer en fraudes y bulos que pueda hacer en este nuevo mundo, que lamentablemente existen y están muy presentes", ha apuntado.
En este punto, Martínez Parera ha recalcado la necesidad de ser precavido con la información que se ofrece en redes sociales. "Me sorprende cuando a veces algunos 'influencers', en un vídeo de menos de un minuto, te cuentan cómo hacerse rico", ha señalado.
MINIMIZAR EL RIESGO DE 'GREENWASHING'
La vicepresidenta de la CNMV también ha centrado parte de su intervención en las finanzas sostenibles, un sector que en los últimos años se ha desarrollado "de forma sustancial", de forma que ya alrededor del 35% de los fondos de inversión en España tiene alguna etiqueta 'verde' (más de 100.000 millones de euros en términos de patrimonio gestionado).
En este escenario, los esfuerzos del supervisor se centran, por un lado, en minimizar el posible riesgo de 'greenwashing', para garantizar que las expectativas que puede tener un producto se adecuen a sus características subyacentes.
Martínez Parera ha asegurado que la CNMV no está observando casos concretos o que le generen una preocupación "relevante" de 'greenwashing', pero sí consideran que es un aspecto relevante en la medida en que "cualquier situación, por pequeña que sea, puede afectar de forma muy negativa a la confianza en el conjunto del sector y en el trabajo hecho hasta ahora".
En su opinión, un área en la que se debe avanzar es en la clarificación del uso de términos relacionados con la sostenibilidad al denominar los fondos de inversión, pues el nombre ofrece mucha información al inversor. En este sentido, ve importante que todos los países, en un contexto globalizado como el actual, sigan los mismos criterios.
Por otro lado, la CNMV también dedica esfuerzos a conseguir canalizar las preferencias de sostenibilidad del inversor de una forma "ordenada y adecuada". En este aspecto, ha agradecido que asociaciones como Asufin estén prestando atención a este asunto, aunque ha reconocido que no se trata de un proceso sencillo y ha apostado por "ser cuidadosos" con las conclusiones que se extraigan, especialmente en una primera fase de implementación de la regulación y a la espera de que ESMA publique sus guías a mediados de 2023.
"Aquí las entidades, lo que tienen que hacer, es ser capaces de explicar al inversor que muestra preferencias por invertir en productos sostenibles esas nuevas características con un lenguaje sencillo y claro, huyendo de los tecnicismos que puedan complicar el proceso de decisiones y explicar las distintas opciones", ha señalado.