HazteOír recurre la multa del Ayuntamiento de Barcelona por el bus #StopFeminazis
BARCELONA, 17 (EUROPA PRESS)
La asociación HazteOír ha presentado un recurso de alzada contra el expediente sancionador del Ayuntamiento de Barcelona que puede costarle hasta 60.000 euros de multa por llevar a la ciudad catalana el pasado 4 de marzo el autobús #StopFeminazis que solicitaba la derogación de las leyes de género, ha informado HazteOír este martes en un comunicado.
El consistorio barcelonés interpuso dos denuncias contra el bus de HazteOír que circulaba con el lema 'No es violencia de género, es violencia doméstica' y 'Las leyes de género discriminan al hombre', y usaba la figura de Adolf Hitler --que aparecía con la cara maquillada y el símbolo feminista en la gorra--.
La primera de las denuncias fue por vulnerar la ordenanza de Paisaje Urbano y regulación de la publicidad dinámica en Cataluña, y la segunda por vulnerar la ordenanza de medidas para fomentar y garantizar la convivencia ciudadana.
La asociación ha reprochado al consistorio que haya rechazado sus alegaciones emitiendo una resolución que "no explica en ningún momento por qué razón discrepar sobre una ley puede suponer un desprecio contra la violencia mal llamada de género".
"La sanción es profundamente antidemocrática porque se nos castiga simplemente por opinar algo diferente a la señora Ada Colau y a los partidos que se someten a los dictados de la ideología de género", ha declarado el portavoz de HazteOír, Javier Villamor.
"PERSECUCIÓN IDEOLÓGICA"
Han recordado que la campaña #StopFeminazis "denunciaba el supremacismo feminista y estaba dirigida a los legisladores para que persiguieran con la misma contundencia todos los tipos de violencia", y que era una crítica contra la Ley de Violencia de Género por Discriminatoria, han puntualizado.
Asimisimo, han criticado que Colau no sancionó al "bus independentista que circuló por Barcelona en diciembre de 2013, fue tolerante con el bus de Òmnium Cultural en agosto del 2018 y enmudeció ante el bus secesionista de CiU con el lema 'Un país que escucha la opinión de todos'", por lo que la acusan de persecución ideológica.