La espiral bajista de Telefónica no tiene fin: ¿dónde están los soportes?

Cada vez que la operadora construye un rebote este termina quedándose por debajo del último máximo decreciente y así no se sube.

Desde los máximos de 2017, en los 10,17 euros, el título acumula una caída del 20%. La definición de tendencia bajista es "aquellas que se caracteriza por construir máximos y mínimos decrecientes" y esto es lo que tenemos a día de hoy en los títulos de nuestra operadora. Cada vez que el título inicia un rebote este se queda por debajo del máximo decreciente anterior y, claro, así no se sube. Dicho esto y en el muy corto plazo nos vamos a fijar en dos niveles: los 8,10 como soporte (mínimos de 2017) y los 8,42 (resistencia horizontal que une los máximos de la sesión del 19 de diciembre y de este martes). Es decir, para tener una primera señal de fortaleza en el título necesitamos que este salte y confirme con claridad por encima de los 8,42 euros. Mientras que la perforación de los mínimos de 2017 no haría sino dar continuidad a la impecable sucesión de máximos y mínimos decrecientes de los últimos nueve meses.

¿Soportes en el título? Lo cierto es que no se observa ninguno de verdad hasta los mínimos crecientes que comenzó a construir en 2016, esto es los 7,28 y los 6,84 euros (efecto Brexit) de 2016.