¿Qué nos dice la vela mensual de noviembre? Ibex, Dax y el S&P, a examen

Si recuerdan, a principios de octubre analizábamos los principales índices bursátiles desde el enfoque de que el mes de octubre suele, estacionalmente hablando, marcar los suelos de mercado. Y así fue.

Las bolsas mundiales marcaban los mínimos de la última fase correctiva el penúltimo/último día del mes de octubre, según el índice que miremos. Y desde ahí comenzó a fraguarse la recuperación. El mes de noviembre estuvo repleto de acontecimientos clave para el devenir de los mercados. Y todo empezaba con las elecciones presidenciales en los Estados Unidos que se celebraban el 3 de noviembre. El grueso de los analistas, incluido un servidor, creíamos tener claro que lo peor para las bolsas era el hecho de tener un resultado incierto que no diera una victoria clara a ninguno de los candidatos a la presidencia de los Estados Unidos. Y lo cierto es que el resultado no puede ser más reñido. Por no hablar de las acusaciones por parte de Donald Trump de numerosas irregularidades en las votaciones de varios de los estados, o lo que es lo mismo de fraude electoral. Y sin embargo las bolsas decidieron subir, sin aspavientos, pero de manera continuada.

Pero el detonante de verdad para el ‘rally’ en las bolsas fue la noticia que se daba a conocer el día 9 acerca del éxito de la vacuna de Pfizer-BioNTech. Éxito a la que se sumó días después la biotecnológica Moderna. El dinero entró sin dudarlo en las bolsas, sobre todo en aquellos sectores más castigados por la pandemia: turismo, aerolíneas, bancos… etcétera. Y hasta hoy. La reacción, totalmente lógica, está poniendo una fecha límite por así decirlo a la duración de la pandemia. Desde ese momento los inversores tienen una visibilidad que antes no tenían, que no es poco. Así, el Ibex ha subido un 25,18% en noviembre (la mayor subida de la historia en un mes), el S&P 500 se revalorizó un 10,8% (mejor mes desde abril), el Dow Jones un +11,9% (mejor mes desde 1987), el Nasdaq un +12,3% (mejor mes desde abril) y el Dax se aupó un 15%.

A continuación, analizamos el gráfico de los siguientes índices:

IBEX 35

A pesar de la subida histórica de nuestro selectivo en el mes de noviembre se puede decir que no hay muchos cambios en lo que, a la tendencia de fondo, la de largo plazo, se refiere. Tenemos una envolvente alcista mensual que por definición es una clara señal de fortaleza de corto plazo. Antesala de lo que pueden ser nuevas subidas. Ahora bien, no se puede descartar una corrección de corto plazo, lógica y normal, que de alguna manera drene/ajuste proporcionalmente las fuertes subidas del mes pasado. Superada la resistencia de los 8.000 puntos (50%) la siguiente gran zona de control la tenemos en los 8.375 puntos (hueco bajista semanal de marzo)-8.470 puntos (61,8% de retroceso de la caída previa).

Es más, no se puede descartar que en las próximas semanas/meses el Ibex termine poniendo rumbo a la que es la resistencia más importante en términos de largo plazo, la directriz bajista que une todos y cada uno de los máximos decrecientes desde 2007 y que pasa en el momento actual por los aproximadamente 9.700 puntos (también parte alta del canal bajista de largo plazo). Resumiendo, la vela de noviembre denota fortaleza y por ello seguimos apostando por nuevas alzas de cara a los próximos meses, con sus caídas contra tendencia o fases de reacción. Pero siempre dentro de una clara tendencia bajista de fondo. Cosa que no se puede decir de la gran mayoría de nuestros vecinos europeos, mucho más fuertes que nuestro mercado.

DAX 30

El gráfico mensual del índice de la ‘locomotora europea’ también habla por sí solo. Al final lo que tenemos es una potente vela mensual con un amplio cuerpo real blanco desde niveles de soporte claves: los mínimos de octubre que a su vez coinciden con el hueco alcista semanal y mensual de junio, en los 11.580 puntos. Dicho hueco se cerró por la mínima durante la caída de octubre, pero desde ahí comenzó la recuperación y en el momento actual, correcciones puntuales aparte, ya no hay nada realmente importante hasta los máximos anuales e históricos, en los 13.795 puntos. Y por encima y como seguro ya saben el índice se colocaría en subida libre absoluta, con las implicaciones alcistas que ello acostumbra a tener para cualquier subyacente en esa situación.

S&P 500

Tenemos al principal índice del mundo en máximos anuales y en máximos de todos los tiempos. Pero también le tenemos en niveles de resistencia, como es la resistencia dinámica que une los sucesivos máximos crecientes desde mediados de 2018. Recta que presenta tres-cuatro impecables puntos de tangencia. Vamos a ver qué nos depara la vela mensual de diciembre, pero sería bueno que, en caso de superar dicha resistencia dinámica, lo hiciera con contundencia. Por abajo, por el lado de los soportes, se observa una importante zona de control en los 3.210-3.230 puntos: los mínimos de septiembre y de octubre. He aquí la prueba de lo que siempre decimos acerca de que la fortaleza está, en términos de medio y de largo plazo, en Wall Street y si miramos a Europa, en el Dax. El Ibex no hay por dónde cogerlo.