PharmaMar 'surfea' sobre la directriz alcista de los últimos cuatro años

Las caídas del 12% desde los máximos de mediados de septiembre encajan por el momento dentro de los parámetros normales en el sentido de que las alzas previas lo fueron del 21%. Acción-fase de reacción se llama.

PharmaMar ha anunciado este jueves que su socio Jazz Pharmaceuticals ha recibido la aprobación condicional de comercialización de Zepzelca (lurbinectedina) por parte del Ministerio de Sanidad de Canadá para el tratamiento de pacientes adultos con cáncer de pulmón microcítico recurrente en estadio III o metastásico. Lurbinectedina estará disponible en Canadá a finales de este año.

Técnicamente, lo que tenemos delante es una directriz alcista de libro, de manual. Esta no es ni más ni menos que una recta soporte, una recta de aceleración de los precios donde cada vez que el subyacente cae consigue entrar dinero en el mercado. En este punto la demanda es mayor que la oferta y por lo tanto el precio reacciona al alza y ahí rebota. Esta recta soporte se caracteriza por construir siempre mínimos crecientes y hemos de exigirle que, como mínimo, presente tres puntos de apoyo o de tangencia en la misma.

Resumiendo, los títulos de PharmaMar se están apoyando, una vez más, en la directriz alcista que une los sucesivos mínimos crecientes desde finales de 2018 y mientras esta se respete no hay nada de lo que preocuparse. Lo que no tendría ningún sentido es que el precio terminara perforando el soporte que tiene en los mínimos de agosto (68,50). Ahí colocaríamos el 'stop loss' de cualquier posición alcista abierta recientemente.