IAG pone rumbo al último hueco bajista: los 1,8375 euros

Sabemos que IAG es un valor roto, un subyacente sin rumbo capaz de lo mejor y de lo peor. Cada vez que parece que se nos hunde al final consigue enderezar el rumbo y a la inversa también sucede. En cualquier caso, se trata de un valor con nulo interés en términos de medio y de largo plazo.

Un ‘gap’ bajista es un espacio que deja el precio (un hueco) que se produce cuando la oferta es mucho más alta que la demanda y por lo tanto, cuando el subyacente en cuestión comienza a cotizar, este lo hace muy por debajo del precio de cierre de la sesión anterior. Los huecos pueden ser tanto alcistas como bajistas. Un hueco bajista tiene connotaciones de debilidad y automáticamente este ‘gap’ se convierte en el ‘stop loss’ para cualquier posición corta (o bajista) sobre el subyacente en cuestión.

Así, vamos a ver cómo se comportan los títulos de IAG ante dicha zona de control, por definición resistencia. El hueco bajista de la sesión del 26 de noviembre en los 1,8375 euros. La experiencia me ha demostrado que en muy raras ocasiones este tipo de 'gaps' se cierran ante la primera ocasión que se produce. Lo normal es que se rellene total/parcialmente para desde ahí corregir de nuevo y en el siguiente intento gozar de una mayor probabilidad de éxito. Pero es cierto que en la medida en que este hueco no se cierre, no tendremos la más mínima señal de fortaleza real en el valor a pesar de los importantes rebotes contra tendencia que se produzcan.

El valor tiene otra importante resistencia en la directriz bajista que une todos y cada uno de los sucesivos máximos decrecientes desde marzo, que pasa en este momento por la zona de los aprox. 2,12-2,13 euros. Ahora bien, están tan alejadas de los actuales niveles de precio que ahora mismo son poco o nada operativas.