Sabadell advierte: el negocio de Rovi en EEUU puede sufrir tras la victoria de Trump

La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos sigue dando que hablar y teniendo su impacto en los mercados. Una de las primeras medidas que ha tomado Trump ha sido nombrar al reconocido antivacunas Robert F. Kennedy Jr como responsable del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés). Esta decisión no ha gustado a las farmacéuticas, que se han desplomado en bolsa, y podría tener efectos muy negativos para compañías españolas como Laboratorios Rovi.

Así lo creen los expertos de Banco Sabadell, aunque mantienen su recomendación de 'sobreponderar' a la cotizada, a la que otorgan un precio objetivo de 90 euros. Desde los precios de cierre del viernes, esta valoración dibuja un potencial alcista cercano al 30% para el valor.

Cabe señalar que Rovi cayó casi un 5% este viernes tras conocerse la designación de la 'oveja negra' de los Kennedy como nuevo secretario de Salud. De igual modo, fabricantes de vacunas como Bavarian Nordic, BioNTech, GSK, AstraZeneca o Sanofi cayeron con muchísima fuerza —hasta más del 10% en algunos casos— en dicha sesión.

El banco catalán destaca que la exposición a Moderna hace que el nombramiento de Kennedy Jr sea claramente "negativo" para Rovi. Moderna comercializa actualmente dos vacunas, la del Covid-19 y la del virus respiratorio sincitial (RSV, por sus siglas en inglés), "solo" cuenta en su 'pipeline' con vacunas para otras indicaciones. Además, Moderna es "el principal cliente de la división de fabricación a terceros (CDMO, por sus siglas en inglés)" de Rovi, que representa un 71% del valor empresarial (EV, por sus siglas en inglés), circunstancia que podría generar un impacto negativo de alrededor del 75% de las ventas actuales de la división.

"De estas ventas, sólo estarían afectadas las ventas de EEUU, cuyo peso desconocemos, aunque no descartamos que puedan superar el 50% del total de los ingresos de Moderna", apunta Sabadell.

Con todo, los expertos del banco catalán reconocen que el impacto del nombramiento de Kennedy Jr "es difícil de cuantificar", pero debería ser "limitado". La tesis de estos analistas se basa en que las ratios de vacunación en EEUU, una vez pasada a la fase endémica, "dependerán en gran medida de la voluntad de vacunarse de cada persona". En consecuencia, Sabadell entiende que "deberían mantenerse estables" y "concentrados en el rango de edad por encima de los 60 años".

Por otro lado, estos analistas apuntan que el peso de Moderna se irá diluyendo dentro de las ventas del negocio de CDMO a partir de 2026 "con la entrada de un nuevo cliente a la división. En concreto, Sabadell estima que se reducirá "hasta niveles del 50%" en 2027.

UN POLÉMICO NOMBRAMIENTO

En una publicación en su red social Truth Social, Trump señaló que "durante demasiado tiempo, los estadounidenses han sido aplastados por el complejo alimentario industrial y las compañías farmacéuticas que se han dedicado al engaño, la desinformación y la desinformación cuando se trata de Salud Pública".

Asimismo, el presidente electo aseguró que, con Kennedy Jr al mando, el Departamento de Salud servirá para "ayudar a garantizar que todos están protegidos de los productos químicos, nocivos, los contaminantes, los pesticidas, los productos farmacéuticos y los aditivos alimentarios que han contribuido a la abrumadora crisis de salud".

"Juntos acabaremos con la corrupción, con la puerta giratoria entre la industria y el Gobierno, y vamos a devolver a nuestras agencias de salud su rica tradición de ciencia basada en evidencias y de referencia", aseguró Kennedy Jr.

Por otro lado, algunos medios estadounidenses indican que Robert F. Kennedy Jr ha rebajado su oposición a las vacunas y ha declarado que no piensa eliminarlas.

Cabe recordar que, en los últimos años, el nuevo secretario de Salud de EEUU ha defendido numerosas conspiraciones. A saber: que las vacunas provocan el autismo; que las "grandes corporaciones han secuestrado nuestras agencias gubernamentales"; que los funcionarios públicos tenían "interés en el envenenamiento masivo" de la ciudadanía estadounidense; o que el Covid-19 es un virus diseñado a "atacar a caucásicos y negros", mientras que "los judíos asquenazíes y chinos" eran biológicamente inmunes.