Los bancos españoles comienzan a publicar sus resultados del primer trimestre de 2023 este jueves. Bankinter inaugura una temporada que finalizará el 5 mayo con las cuentas de CaixaBank. Al otro lado del Atlántico, las grandes entidades ya han comenzado a rendir cuentas ante el mercado, con varias sorpresas positivas. Por ello, desde Vontobel creen que el sector financiero continuará con la tendencia creciente de beneficios de 2022, un hecho que puede llegar a ser un "catalizador para la deuda financiera europea".
Así opina Dillon Lancaster, gestor de carteras en TwentyFour AM (Boutique de Vontobel) que considera que "la próxima temporada de resultados puede ser un catalizador positivo que provoque una cierta normalización de los precios de los bonos".
En el mes de marzo, los bancos han sido los auténticos protagonistas del mercado. Las turbulencias desatadas tras las caídas de Silicon Valley Bank, Signature Bank y los problemas de Credit Suisse despertaron el temor a una nueva crisis mundial como la vivida en 2008.
No obstante, el sector ha sabido recomponerse y los niveles de negociación de la deuda bancaria "se han mantenido casi sin cambios en abril, tras haber recuperado las pérdidas posteriores a Credit Suisse", explica Lancaster.
Por ello, la atención de los inversores estaba puesta en los resultados de los bancos americanos, principalmente después de que la crisis afectara de manera más profunda a las entidades regionales del país.
Todo hacía presagiar que los beneficios de la gran banca se iban a ver negativamente afectados. Sin embargo, las subidas de los tipos de interés han impulsado al alza las ganancias.
JP Morgan dio el pistoletazo de salida con unos resultados que sorprendieron para bien. El banco presidido por Jamie Dimon informó de un repunte del 52% en su beneficio neto, hasta los 12.622 millones de dólares.
Wells Fargo no se quedó atrás y reportó un aumento del 32% en sus ganancias de los tres primeros meses del año. El beneficio de la firma radicada en San Francisco ascendió a a 4.991 millones de dólares, viéndose enormemente favorecido por las subidas de 475 puntos básicos de la Reserva Federal en ese periodo.
Citigroup registró una tendencia similar al ver crecer sus beneficios un 7%, hasta los 4.606 millones de dólares, cuando en los tres primeros meses de 2022, las ganancias fueron de 4.306 millones de dólares.
Del mismo modo, Bank of America (BofA) ganó un 15% más, hasta los 8.200 millones de dólares, en el primer trimestre de 2023, y el beneficio de Bank of New York Mellon alcanzó los 905 millones de dólares, cifra un 29% superior que en el mismo periodo de 2022.
BANCOS EUROPEOS
En cuanto a los resultados de los bancos europeos, que irán dando a conocer sus cuentas en los próximos días, se espera que se mantenga la tendencia de fuertes ingresos, beneficios e ingresos netos por intereses.
"De hecho, estos últimos deberían mejorar drásticamente para las entidades financieras del Viejo Continente a lo largo de este año, ya que el Banco Central Europeo (BCE) inició su ciclo de subidas después de la Reserva Federal, y se espera que continúen más allá que sus homólogos estadounidenses", puntualiza Lancaster.
Esta fortaleza en los fundamentales ya ha comenzado a tener un impacto positivo en las recientes actuaciones de las agencias de calificación.
"En el primer trimestre hemos observado subidas de calificación para entidades como Barclays, Commerzbank y NatWest y, en general, Moody’s ha concedido dos subidas y media por cada rebaja en el sector financiero europeo en el primer trimestre", detalla el experto.
Con todo, los depósitos siguen estando en el foco de atención de los inversores, pero, según Lancaster les ha "animado" el diálogo mantenido con bancos británicos y europeos y su afirmación de que se sienten cómodos con los niveles de liquidez y la actividad de depósitos que han registrado desde la crisis bancaria regional estadounidense.
Además, este analista avanza que hay indicios de que el Banco de Inglaterra esté considerando la posibilidad de aumentar la cantidad cubierta por el sistema de garantía de depósitos del Reino Unido, "lo que, en caso de hacerse realidad, consideramos que también sería un avance muy positivo".
Por lo que, ante este escenario de calificaciones crediticias y de fundamentales de las entidades financieras europeas muy favorables y con sus bonos cotizando actualmente a niveles muy amplios en comparación con las medias históricas, "la próxima temporada de resultados puede ser un catalizador positivo. En nuestra opinión, el sector parece especialmente barato en estos momentos", concluye Lancaster.