2024 se presenta como un año para despejar incógnitas sobre la evolución de la inflación, el futuro gobierno de EEUU, la senda económica de China y las incertidumbres geopolíticas. En medio de este contexto, desde Singular Bank apuestan por mantener una estrategia defensiva "a la espera de una inflexión en el ciclo".
Así lo ha puesto de manifiesto la entidad, en la presentación de sus perspectivas económicas y estrategia de inversión para este año, donde se han mostrado 'infraponderados' en renta variable y con una posición inicial defensiva. "Primamos sectores como el sanitario, el eléctrico, de consumo básico y las petroleras respecto a los mas cíclicos", ha señalado Roberto Scholtes, jefe de estrategia del banco.
Por mercados, prefieren Europa y Japón frente a EEUU y China; sin embargo, creen que habrá algún momento en el año en el que, ajustadas las expectativas respecto al crecimiento y a la actuación de los bancos centales, "podamos dar un gran giro respceto a la estrategia de inversión", ha añadido el experto.
"Esperamos una reversión parcial del movimiento de los dos últimos meses en los mercados. Viene un proceso de consolidación y corrección de estas subidas tan fuertes", ha subrayado Scholtes, quien estima que "los bancos centales van a recortar sus tipos más tarde y más lento de lo que descuentan los mercados".
En este sentido, anticipan tres bajadas de tipos, "como mucho", por parte de la Reserva Federal (Fed) y dos para el Banco Central Europeo (BCE), mostrándose cautos respecto a los recortes y apostando por un ritmo menor a lo que está descontando el mercado.
"Prevemos un mayor enfriamiento de la economía, especialmente de la de EEUU. Esto va a llevar a una rebaja de los beneficios empresariales y a un repunte de los diferenciales crediticios. En estas dinámicas se van a mover los mercados hasta que se visulumbre que la economía está tocando suelo y se dé inicio a un ciclo de decrecimiento", ha matizado.
Será en este momento cuando desde Singular Bank aumenten su apuesta por la renta variable y en el que se podrán aprovechar las oportunidades que hay en las valoraciones de pequeñas y medianas compañías que están cotizando con un gran descuento.
No obstante, y aunque en la firma confían en que se producirá este punto de inflexión, no saben cuándo sucederá.
"Variables clave para este punto de inflexión serán lo que digan y hagan los bancos centrales y cuándo se produce la rebaja de estimaciones de beneficios empresariales. Estamos muy en manos de los bancos centrales", ha reiterado Scholtes.
En cuanto a otros sectores como el bancario, "vamos a un año de crecimiento muy modesto o de estancamiento de beneficios. El factor que va a decantar el año será la morosidad", ha matizado el estratega jefe, aunque siguen 'sobreponderando' banca.
Respecto al lujo, las expectativas de consumo de bienes duraderos van a tener un tono menos dinámico. El consumidor chino todavía no se ha recuperado y las perspectivas económicas de China no permiten tener mucho optimismo respecto a este sector.
RENTA FIJA
En Singular Bank también han remarcado que tienen "un sesgo de invertir más cono bonistas que como accionistas" y que en renta fija ven un mayor atractivo en los activos monetarios y en la deuda de EEUU.
"Hemos pasado de bonos de mercados emergentes a bonos ligados a la inflación", ha indicado Scholtes.
Asimismo, prevén que las oportunidades de inversión en renta fija están en papel corporativo de corto plazo, en la deuda pública de EEUU, crédito corporativo de alta calidad y los fondos de préstamos sénior. "Habrá algún punto en el que se puedan alargar duraciones o volver a apostar por el high yield", ha agregado el experto.
DESACELERACIÓN DEL CRECIMIENTO
Para Singular Bank, las previsiones económicas globales seguirán marcadas por un elevado grado de incertidumbre y por la necesidad de tener en cuenta escenarios alternativos tanto en la toma de decisiones de política económica como de carácter empresarial.
Por ello, pronostican que el crecimiento del PIB mundial pueda situarse en 2024 en el entorno de un 2,0% anual, lastrado por el riesgo de estancamiento de la eurozona, y el menor dinamismo de la economía china y del resto de países emergentes.
"En el caso de Europa, esperamos que la economía de la eurozona vaya hacia un un estancamiento o un crecimiento muy bajo. En EEUU puede hacer un 'aterrizaje suave', con un crecimiento del 1%, y proyectamos un estancamiento en los dos próximos trimestres", ha valorado Alicia Coronil, economista jefe de la entidad.
Para Coronil, las economías pueden repuntar en la segunda parte del año, cuando los bancos centrales bajen tipos. Unos descensos que proyectan para junio.
La economía mundial se verá afectada por un menor crecimiento en China, a la que le va a seguir pasando factura su crisis inmobiliaria, aunque el gobierno impulsará la barterias, la transición energética y el coche eléctrico para crecer.
"En 2024 las decisiones de los gobiernos y las empresas seguirán marcadas por la geoeconomía y el nuevo entorno de tipos de interés, de precios y de poder adquisitivo. El endurecimiento de las condiciones financieras, en un contexto en el que probablemente el BCE y la Fed realizarán la primera rebaja del coste del dinero a partir de junio, seguirá permeando sobre la economía real a través de una mayor moderación del consumo y de la inversión, el repunte de la morosidad, la ralentización de los beneficios empresariales y el menor dinamismo del mercado laboral, entre otros factores", ha puntualizado la economista.
De ahí que insistan que este año será un punto de inflexión, "ya que tanto EEUU como la Eurozona registrarán un menor ritmo de crecimiento afectado por sus retos internos, el menor dinamismo de China y la ralentización del comercio mundial durante la primera parte de 2024", ha concluido Coronil.