En opinión de los gestores de Bank of New York Mellon, existen varias razones por las que las acciones que reparten dividendos son una opción atractiva para los inversores en el escenario actual.
En primer lugar, señalan que "los dividendos brindan una buena protección frente a la inflación, y a menudo son sostenibles debido a que muchas empresas están reduciendo sus coeficientes de reparto".
Además, afirman que "las acciones con dividendo parecen baratas comparadas con el mercado en general y con las acciones de crecimiento", muy penalizadas en lo que va de año.
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Dividendos frente a los bonos: ¿qué opción de inversión es más interesante?Según los gestores del banco americano, "unas valoraciones elevadas y expectativas de beneficio más normalizadas deberían llevar a los inversores a concentrarse nuevamente en el dividendo". En este contexto, creen que un mayor porcentaje de la rentabilidad total podría proceder de esta fuente.
Por otra parte, señalan que las acciones que reparten dividendos "pueden proporcionar diversificación a una cartera". Y recuerdan que durante la recuperación de 2021, las oportunidades generadoras de renta demostraron ser capaces de desvincularse de las acciones growth cuando estas se vieron presionadas.
¿QUÉ SECTORES SON LOS MÁS ATRACTIVOS?
John Bailer, gestor del BNY Mellon Global Equity Income Fund, afirma que la concentración manifiesta en el crecimiento por parte de la bolsa estadounidense en los últimos diez años ha conducido a un exceso de oferta de servicios digitales en el mercado, creando excesos de capacidad en muchas áreas del sector tecnológico.
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Renta 4 inicia cobertura en ACS: atractiva política de dividendos y sólida operativaUna de ellas es el marketing digital, donde anticipa que la evolución esperada de las compañías no será tan buena como en la última década. Esto, añade, podría deberse al menor gasto corporativo en publicidad en el marco de un entorno macroeconómico complicado.
En cambio, Bailer cree que algunas áreas de la “vieja economía” recibirán un impulso de financiación, pues muchos inversores les dieron la espalda en la década pasada. El gasto de capital en activos físicos (como el equipamiento de extracción de crudo, por ejemplo) ha estado cayendo, y el gestor afirma que la dinámica de oferta y demanda es buena para el petróleo en este contexto. “Creemos que los precios del petróleo deberían permanecer más altos durante más tiempo, y que incluso en una recesión, la demanda se mantendrá estable”, añade.
Además, un segmento de infraestructura que según el gestor podría ofrecer oportunidades es la red eléctrica, como beneficiaria potencial de la actual transición hacia las renovables. Una posible oportunidad son las empresas que venden a proveedores de suministro público, pues estos últimos no son sensibles a la economía, explica el gestor: “Una utility regulada gastará con independencia de la coyuntura económica global, debido a la necesidad de hacer realidad un futuro renovable. Con más y más coches conectándose a la red, junto al desarrollo de la energía eólica y solar, las compañías industriales que venden a los grupos de suministro público se beneficiarán del mayor gasto y no serán cíclicas”.
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Deutsche Bank señala a Acerinox como su idea favorita de trading: "Vale la pena"La defensa es otra área en la que Bailer detecta oportunidades, pues la invasión rusa de Ucrania ha llevado a varios países a elevar su gasto en armamento. En este sentido, recuerda que poco después de que Rusia lanzara su ofensiva en febrero, Alemania se comprometió a elevar su gasto militar por encima del 2% del PIB6, y Polonia elevó el suyo del 2% al 3% del PIB7. “Los clientes gastarán en defensa haga lo que haga la economía”, sentencia.
El gestor afirma que, antes del conflicto en Ucrania, los múltiplos de valoración de las acciones de defensa no eran muy altos, y no se ha producido una revalorización significativa desde entonces.
También destaca que la escasez de semiconductores en el marco de los problemas en las cadenas de suministro globales ha afectado a las empresas de defensa, pero una ralentización del crecimiento global podría liberar capacidad, al disminuir la demanda de chips procedente de otros sectores. “Al frenarse el crecimiento, habrá muchos semiconductores disponibles para las compañías de defensa, y al mismo tiempo, es poco probable que sus ingresos disminuyan”, afirma.
Bailer busca además empresas con poder de fijación de precios como colchón frente a mayores niveles de inflación, y destaca que ciertas aseguradoras (sobre todo las que operan en el segmento de pólizas de compensación al trabajador) podrían beneficiarse de subidas salariales.