El Gobierno de Colombia y las FARC firmaron el fin del conflicto

Con los importantes temas acordados y refrendados con las firmas de Santos y ‘Timochenko’, se pretende dar salida a una guerra interna que ha dejado innumerables huellas en el país y que hoy, parece encontrar una salida negociada para garantizar la vida de los guerrilleros desmovilizados y su participación en política como solución.

Teniendo a Cuba y Noruega como países garantes, además del acompañamiento de los Gobiernos de Venezuela, Chile, México y la ONU, entre otros, se presentaron en La Habana los pactos que alcanzaron las delegaciones de paz para avanzar a una nueva fase en que termina el guerra.

El Presidente Santos recordó todas la iniciativas de paz que se han intentado desde la década del 80 y aseguró que este es un “día histórico para el país”.

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Aunque restan ajustes para la firma del acuerdo final, Gobierno y FARC firmaron en La Habana los acuerdos que permiten definir 23 zonas de concentración para los desmovilizados, los procedimientos para garantizar su seguridad, el procedimiento tras la dejación de armas y, entre lo más importante, la guerrilla reconoció el monopolio de la Fuerza Pública y aceptaron al Estado, además de comprometerse a no repetir los tristes hechos vividos.

Aún falta el acuerdo final

Con la ONU como verificador especial, las partes presentaron el cronograma para el protocolo que se deberá seguir tras la firma del acuerdo final y en el que se contemplan los momentos en que se entregarán las armas y la forma en que operarán las zonas de desmovilización y la seguridad para los ex guerrilleros.

Asegurando que “el futuro en Colombia será la paz”, el presidente anfitrión durante los casi cuatro años de diálogos, Raúl Castro, felicitó a las partes por los acuerdos logrados y les motivó a pasar a la acción para hacer tangibles los pactos de la mesa de diálogos.

Con los importantes temas acordados y refrendados con las firmas de Santos y ‘Timochenko’, se pretende dar salida a una guerra interna que ha dejado innumerables huellas en el país.

A su turno, el comandante máximo de las FARC, Rodrigo Londoño, alias ‘Timochenko’, aseguró que su grupo se encuentra confiado en que esta sea “el último día de la guerra” y dijo que considera aliadas a la Fuerza Pública, además de ratificar que su principal intención es hacer política “sin armas”.

Por su parte, el Presidente Santos recordó todas la iniciativas de paz que se han intentado desde la década del 80 y aseguró que este es un “día histórico para el país”. Resaltando que el acuerdo de hoy significa “el fin de las FARC como grupo armado”, el Mandatario colombiano aseguró que con la firma lograda “se abre un nuevo capítulo que nos devuelve la esperanza” y resaltó que “llegó la hora de vivir sin guerra”.

Además de poner fin al conflicto entre Gobierno y FARC de forma bilateral, uno de los temas más importantes en las declaraciones fue la aceptación del plebiscito como mecanismo para refrendar los acuerdos, ante lo cual el grupo rebelde se mostraba en desacuerdo y se veía como un obstáculo para el avance hacia el acuerdo final.

Aunque el Presidente Santos había puesto al 20 de julio como plazo tentativo para el acuerdo final, lo cierto es que las partes deberán ultimar detalles en los próximos días y avanzar para la presentación de el momento final, en que todo lo pactado deberá ser implementado en el terreno. El Presidente de Colombia resaltó que el acuerdo final será firmado en Colombia y resaltó que ambas delegaciones pondrán 'acelerador' en los temas que restan.

Resaltando que el fin del conflicto es apenas el punto de partida, el Presidente Santos aseguró que defenderá a las FARC como impulsor de la paz y les dio la bienvenida a la democracia.

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