La crisis del coronavirus está dejando un reguero de fondos de bancos y boutiques en entredicho por su comportamiento durante los últimos meses. Santander, Unicaja o Altair Finance son los últimos que se han visto obligados a modificar al alza el indicador de riesgo en muchos de sus fondos, ya que desde marzo el precio de estos ha oscilado más fuertemente de lo que su folleto había comercializado a los clientes en un primer momento. Estas entidades se suman a CaixaBank y Sabadell, que fueron los primeros en alertar de estos cambios de condiciones forzosos.
Cinco fondos de Santander Asset Management se han visto afectados por esta decisión, entre ellos el famoso Santander Small Caps España de Lola Solana, que ha pasado de un riesgo cinco a un riesgo seis. En lo que va de año, el fondo de Solana pierde un 19,5%, según Morningstar. Otros fondos cuyo indicador de riesgo también se ha incrementado son el Santander Dividendo Europa o el Santander Renta Fija Ahorro.
En Unigest, la gestora de Unicaja Banco, cerca de una docena de productos han tenido que pasar por el aro de ESMA y la CNMV y reconocer públicamente que tenían más riesgo del previsto, algunos como el Unifond Renta Fija Euro, el Unifond Small & Mid Caps o el Unifond Bolsa Internacional. También sus perfilados. Por ejemplo, el Unifond Mixto Renta Fija, que baja un 2,8% hasta julio, ha subido del riesgo tres al cuatro.
Uno de los buques insignia de la gestora independiente Altair Finance, el Altair Patrimonio II, ahora es de riesgo cuatro, cuando antes era del tres. En los primeros siete meses del ejercicio, cede un 4,8%.
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Un primer fondo español, de Santalucía, se ve afectado por el cierre de fondos extranjeros“Dicha subida no se debe a una modificación de la política de inversión, ni a un cambio del criterio de selección de los activos, ni a una estrategia de inversión distinta”, recogen los hechos relevantes de todos estos fondos, que han sufrido un aumento en la volatilidad de su valor liquidativo durante las últimas 16 semanas. Se trata más bien de una situación sobrevenida, como ha sido la crisis del Covid-19, que ha conllevado fuertes pérdidas en los fondos y una alta volatilidad en los mercados, más de lo previsto en los modelos de riesgo previos de las entidades.
CAIXA Y SABADELL, LOS PRIMEROS
El indicador de riesgo que los fondos incluyen en su documento de datos fundamentales para el inversor (DFI) y en su folleto se mueve en una escala ascendente de rentabilidad/riesgo, que va del uno (poco riesgo) al siete (mucho riesgo), según establece la CNMV. Todas estas entidades han procedido según establece las ‘guidelines’ de ESMA, el supervisor europeo de los mercados financieros. A partir de ahora, el indicador de riesgo que tengan estos fondos será más realista en cuanto a los posibles movimientos del mercado cuando este se estresa hasta niveles extremos, como sucedió desde marzo.
En el caso de Sabadell Asset Management, ha tenido que retocar al alza el indicador de riesgo de casi una decena de fondos, como el Sabadell Europa Bolsa, el Sabadell América Latina Bolsa, el Sabadell Rentas o el ‘hedge fund’ Sabadell Selección Épsilon. Por su parte, CaixaBank Asset Management ha actuado sobre una veintena de fondos, prácticamente, entre ellos el CaixaBank Renta Fija Flexible, el CaixaBank Selección Tendencias, el CaixaBank Smart Renta Variable Europa o el Albus, que vende entre los clientes de banca privada.