Colombia amanece llena de expectativas por el fin de las negociaciones entre Gobierno y FARC

"Estamos a las puertas de importantes anuncios que nos acercan al acuerdo final #VamosPorLaPaz", escribió ayer en Twitter el jefe máximo de las FARC, Rodrigo Londoño, alias 'Timochenko', y las especulaciones no se han detenido desde entonces.

Más tarde, desde la cuenta de Twitter del Equipo de Paz del Gobierno Nacional, se empezaron a publicar fotos que se acompañaban de comentarios como "A esta hora seguimos en reuniones decisivas camino hacía la paz", y en la noche publicaron: "Se acerca el día... Vamos camino a la paz".

La negociación, que se rige por el principio de que "nada está acordado hasta que todo esté acordado", comenzó en La Habana en 2012.

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Las delegaciones del Gobierno y las FARC difundieron ayer en la capital cubana un comunicado conjunto en el que señalan que han "avanzado en la construcción de acuerdos pero aún quedan temas pendientes. Seguimos trabajando en intensas jornadas. Una vez alcancemos el acuerdo final, el país lo conocerá".

Por el momento no se tiene organizado un gran acto protocolario, por lo que se da como un hecho que este miércoles o como muy tarde el jueves, sean Humberto de la Calle e Iván Márquez, en su condición de jefes de ambas delegaciones, quienes rubriquen los textos finales.

En la noche de este martes desde Bogotá se conoció que viajaron a Cuba algunos funcionarios y asesores del Gobierno, que acompañarán estos detalles finales, así como la transmisión que se hará por televisión y redes sociales del acuerdo.

Igualmente se conoció que el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, hará una alocución al país a las 19.00 (hora local), después de que se produzca la firma de los documentos en La Habana.

Una vez cerrados los textos por completo, tal y como exige la ley, estos serán enviados al Congreso para que se convoque al plebiscito en el que los colombianos podrán ratificarlos o rechazarlos.

El Gobierno quiere que esta consulta no se demore más allá de la primera quincena de octubre y tratará de evitar que se solape con la reforma tributaria, es decir, con la subida de los impuestos a los colombianos, que se anunciará antes de que acabe el año.

Las FARC, por su parte, llevarán el acuerdo final a un congreso interno, lo que se conoce como 'Décima Conferencia', en el que las bases guerrilleras darán el visto bueno a lo negociado en La Habana desde 2012 y renunciarán al alzamiento armado para convertirse en un partido político.

La negociación, que se rige por el principio de que "nada está acordado hasta que todo esté acordado", comenzó en La Habana en 2012 y ya alcanzó acuerdos en los cinco puntos pactados: tierras y desarrollo rural, participación política, cultivos ilícitos, víctimas y fin del conflicto, así como en el adicional sobre el mecanismo de refrendación.

El senador Roy Barreras, uno de los negociadores del Gobierno, aseguró desde La Habana que estos han sido los días "más intensos y positivos en mucho tiempo".

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