Cuando realizamos un repaso a los diferentes sectores de la economía de nuestro país en estos últimos años obviamente obtenemos un panorama no muy positivo, panorama en el que el retroceso ha sido generalizado en todos los sectores productivos, y en algunos casos, como el sector del automóvil o el inmobiliario, este retroceso ha resultado más que notable; sin embargo aunque en menor medida no dejamos de adquirir automóviles o viviendas, por lo que productos financieros como los préstamos para vehículos o los préstamos hipotecarios siguen siendo herramientas necesarias a tal efecto.
Desde luego merece mención aparte, y en un futuro próximo dedicaremos un artículo a tal cuestión, realizar una comparativa entre las propias posibilidades de financiación de las marcas automovilísticas y las propuestas las entidades financieras, pero en este caso vamos a centrarnos en estas últimas con la propuesta de Crédito Coche BBVA, revisaremos en sus características principales.
En primer lugar si nos encontramos ante una operación de financiación que nos va permitir tanto la adquisición de un vehículo nuevo como usado, desde luego interesante si tenemos en cuenta que dentro de este tipo de préstamos o créditos vamos a encontrar en muchos casos limitaciones orientadas a la compra de vehículos nuevos.
Pero debemos precisar que en el caso de la compra de un vehículo usado este producto nos va a premiar que dicho vehículo no posea más de tres años de antigüedad, ya que sobrepasando dicha antigüedad las condiciones, como veremos, no serán las mismas.
De entrada para un coche nuevo o dentro de ese rango de tres años máximo de antigüedad, el producto nos propone una financiación que con determinadas condiciones de vinculación puede situarse en el 6,5% TIN para un máximo de 75.000 € financiados en un plazo de amortización máximo de 120 meses con una comisión de apertura del 2,20% que en ningún caso será menor de 90 €, tomando esta cifra como referencia en caso de que el citado porcentaje resultara inferior.
Para lograr estas condiciones el usuario dispone de dos bonificaciones; la mayor de ellas podría el hecho de mantener la nómina domiciliada en la entidad, bonificación a la que sumar la contratación del seguro de protección de pagos, sin estos elementos el interés ascendería al 8,5% TIN, ya que la domesticación de la nómina supone un descuento del 1,5% TIN en los intereses mientras que la contratación del citado seguro de protección de pagos otro descuento del 0,5% TIN. Debemos tener en cuenta que la financiación que este crédito nos propone manteniéndose siempre dentro de ese rango máximo de 75.000 € puede alcanzar el 100% del valor del vehículo.
Por otro lado la adquisición de un coche de segunda mano de más de tres años de antigüedad como decíamos proporciona otras condiciones al producto ya que de entrada para el mismo importe plazo de amortización se nos pedirá un interés del 10% TIN, al que se podrán añadir las bonificaciones anteriores que lo reducirán en el mejor de los casos al 8% TIN.