Es posible que muchas ocasiones el lector haya oído referirse a los préstamos ICO, pero, probablemente, si no es empresario o autónomo, este tipo de financiación le quedé un tanto lejana, sin embargo, en un momento en el que el microempleo y la opción del autoempleo cobran mucho peso en un mercado laboral tan cerrado como el nuestro, resulta interesante cuando menos acercarse a los conceptos generales de estos préstamos apoyados por el Instituto de Crédito Oficial.
En líneas generales, podemos decir, que los préstamos ICO, por ejemplo los pertenecientes a la Línea ICO Empresas y Emprendedores 2013, se convierte en él una suerte de financiación preferente orientada a la facilitación para autónomos y empresas a obtener financiación para proyectos de inversión en el ámbito nacional, y también financiación para cubrir necesidades relacionadas con la liquidez.
Lógicamente por sus propias características, este tipo de préstamos van dirigidos exclusivamente a empresas o autónomos, y, dentro del rango de financiación que admiten, podemos encontrar una variedad amplia directamente relacionada con el desempeño profesional, que va desde la compra de activos fijos productivos tanto nuevos como de segunda mano, las adquisiciones de empresas, los gastos de circulante con los límites establecidos del 50% del importe total de la financiación, aunque podrán ser ampliados al 100% para operaciones hasta 1, 2 y 3 años, y también en salvedades como puede ser los proyectos de reforma de elementos comunes para comunidades de propietarios y particulares, donde podrán incluirse incluso hasta 100% de los importes totales de financiación.
Existen condiciones varias, como por ejemplo la duración máxima de los plazos de amortización que queda establecida en 20 años, la antigüedad máxima de inversión que deberá ejecutarse el plazo máximo de un año a contar desde la fecha de la firma del contrato, o la posibilidad de elección de los tipos de interés.
Aunque lógicamente hay más elementos y cuestiones que conforman este tipo de préstamos, en líneas generales éstas serían las cuestiones fundamentales y más representativas de este tipo de modelo de financiación a empresas y autónomos.
