Si algo puede calificarse de contracorriente en el mercado de productos financieros, tal y como están las cosas, es el hecho de lanzar hipotecas a interés variable con diferenciales por debajo del 2%. ¿Las hay? si y cada vez más aunque con condiciones de vinculación muy rígidas.
Superadas las dudas sobre el efecto de la bajada de los tipos de interés en las hipotecas (que no se resolvieron con una bajada generalizada de los precios de los préstamos hipotecarios precisamente) encontramos cada vez más hipotecas que se atrevan a romper ese diferencial por debajo del 2%.
Nos encontramos desde luego a fecha de hoy con una de las mejores hipotecas medias del mercado, por no decir la mejor, una hipoteca que además de presentar el interés fijado en Euribor + 1,95% (una TAE variable al 3,48%) se presenta sin comisiones, sin cláusula suelo, y sin exigencia de más garantías que la propia vivienda de adquisición.
Sin embargo el producto por otro lado si presenta algunos condicionantes que puede que no lo hagan asequible a todos los bolsillos.
Se trata de una oferta condicionada a unos ingresos totales de los titulares superiores a los 3000 € mensuales y destinada a la adquisición de vivienda habitual, que presente un valor de casación superior a los 150.000 €, para un crédito hipotecario que no superará el 80% del valor de la vivienda, dentro de un plazo de amortización máximo de hasta 30 años. La obtención de las mejores condiciones se vincula también a la contratación un seguro de vida de amortización de préstamo por el importe total del préstamo, así como la contratación del seguro multi riesgo de hogar y la de un seguro de protección de pagos.
La oferta de la hipoteca queda condicionada hasta el 31 diciembre del presente año 2013 o hasta alcanzar en importe ofertado por la entidad, que se corresponde a la cifra de 351 millones de euros.
