El nuevo examen de conducir aumenta los suspensos y la agresividad

Con poco más de un mes desde que entrase en vigor el nuevo examen práctico del carné de conducir, ya se empiezan a ver los primeros resultados. Hay que recordar que la implantación de este nuevo tipo de examen tenía por objetivo estimular la conducción autónoma de los conductores, permitir que se aumente la autonomía ante distintas situaciones… pero no sé si se está consiguiendo el objetivo.

Así lo demuestra el sindicado CSI-F de Valencia, que afirma que desde que se puso en práctica el nuevo examen ha aumentado en un 7,6% el nivel de suspensos en la Comunidad Valenciana. La nueva prueba, que consiste en 25 minutos de duración a lo largo de los cuales son diez minutos de conducción autónoma, ha ocasionado que un poco más de la mitad de conductores suspendan el examen.

Aún es pronto para valorar la eficiencia de este nuevo tipo de examen, más aún cuando son datos que afectan a una muestra del colectivo, pero no parece que vaya por buen camino. En especial, el colectivo más afectado podrían ser los propios examinadores, que se sienten más amenazados. No, no es ninguna broma. El examinador ahora debe de comunicar de forma oral el resultado del examen y explicar en qué se ha fallado.

Esto al parecer está aumentando los episodios peligrosos del examinado frente al examinador, aumentándose de manera notable las «situaciones de tensión, con gritos o insultos al examinador durante la prueba«. La primera medida ha sido establecer entornos seguros para establecer la comunicación entre examinado y examinador, pero por el momento no se ha obtenido respuesta alguna por parte de la Jefatura Provincial de Tráfico de Valencia. En cualquier caso, no hay que olvidar una frase crucial: la gente es quien suspende.

Fuente: Levante EMV