Marussia: el triunfo de la humildad
No solo los grandes equipos están trabajando intensamente de cara al próximo Mundial de Fórmula Uno. Las pequeñas escuderías tienen, si cabe, un reto mucho mayor: el de mantenerse en la élite del automovilismo profesional. Una de ellas es Marussia, que ha hecho una temporada aceptable, siempre y cuando teniendo en cuenta su humilde patrimonio. Y es qu8e es verdaderamente complicado lograr aguantar en el ‘Gran Circo’ apostando por la austeridad y sin tener demasiada repercusión mediática. Por eso desde aquí queremos dar voz al jefe del equipo. «Creo que hemos mejorado operacionalmente, año tras año. Parecemos un verdadero equipo de F1, funcionamos como un equipo de F1 decente; en las paradas en boxes somos muy buenos y en todos los elementos básicos. Aunque las posiciones a lo largo del año no eran tan diferentes en comparación con el año anterior, en términos porcentuales estábamos mucho más cerca de la parte delantera en 2013 y creo que hemos terminado un par de carreras en la misma vuelta que los líderes. Pero tenemos que avanzar de nuevo, tenemos que seguir adelante para la temporada 2014″, dijo John Booth.
La visión del futuro de Marussia es ciertamente optimista por parte de su máximo mandatario. A decir verdad, es complicado que puedan seguir avanzando y ya bastante meritorio es que no hayan sido los últimos en la clasificación general. «Creo que tenemos el presupuesto más bajo en la F1 y no somos el equipo peor clasificado por el momento, por lo que demuestra que se puede seguir progresando«, añadió Booth. Sea como fuere, estas desigualdades tan grandes existentes en la Fórmula Uno nos hacen pensar que algo no se está haciendo bien y que, como muchos ya han vaticinado, la gallina de los huevos de oro puede perecer en un futuro próximo si no se toman las medidas adecuadas.
Marussia ha terminado en la décima posición de la clasificación general, un resultado muy positivo y que muy pocos podían prever a principio de temporada. El objetivo para el futuro, en cualquier caso, es seguir mejorando. «No hay mucha diferencia en premios, en realidad no la hay. El tema del dinero no es algo insignificante, pero el impulso que se ha dado a todo el mundo es la mayor ventaja», concluyó el mandamás del humilde equipo. Por el bien del deporte y la competencia leal, lo mejor es que se siga apostando por las escuderías más humildes y que se palien las diferencias entre unos y otros.
