La comunicación entre automóviles puede suponer un ahorro de hasta 11.000 millones
|Coches interconectados electrónicamente podrían aportar un beneficio económico estimado en 11.000 millones de euros. El estudio se ha realizado sober la plataforma geográfica de la República Federal de Alemania.
Recientemente se han presentado en FFM las conclusiones de un estudio de campo. Solamente en accidentes que se pudieran evitar, el ahorro sería de 6.500 millones de euros anuales. El proyecto SIMTD – Sichere Intelligente Mobilität – Testfeld Deutschland (Movilidad inteligente y segura, campo de pruebas Alemania) realizado en consonancia entre industria automotriz, ciencia y sector público, ha testado como los vehículos intercambian informaciones entre ellos y con una central por medio de internet.
El director del proyecto SIMTD, perteneciente al grupo Daimler, dice que la tecnología está a punto para el mercado y que ahora la pelota está en el tejado de los fabricantes. Por otro lado, Mercedes ya ha anunciado que equipará todavía éste año vehículos de serie con la tecnología «Car-to-X«.
Con ésta nueva tecnología inalámbrica los conductores podrán ser informados de manera acústica y visual de posibles peligros. Como por ejemplo en caso de tomar una curva cerrada en donde la visión de un coche parado en el arcén es reducida.
Esta tecnología se basa en WLAN y en las tecnologías UMTS y GPRS. Por medio de éstas redes de comunicación se transmiten los datos que los vehículos previamente han registrado por medio de sensores, cámaras y radares.
Mercedes introducirá la tecnología Car-to-X
Esta tecnología permitirá al conductor reconocer anticipadamente posibles obstáculos en carretera. Es decir, en caso de un vehículo de socorro o un vehículo parado por problemas, el sistema avisará al conductor para que éste adecue velocidad y dinámica para que no se llegue siquiera a la situación de peligro. El Car-to-X también posibilita avisar al conductor de posibles conductores fantasma o de las condiciones meteorológicas.
Los vehículos equipados con Car-to-X no solo serán receptores de datos, sino también emitirán datos para que otros conductores no se vean en situacione comprometidas.
Pero desde la Universidad técnica de Munich llaman a la calma. Si bien la tecnología es una realidad la introducción inmediata es más bien utópico. Son hasta diez años, los que se necesitarán hasta que la gran mayoría de conductores sean partícipes del Car-to-X.
Por lo pronto, hasta 2015, no se montará el sistema a lo largo de un trayecto concreto. Será entonces cuando el recorrido desde Rotterdam hasta Viena se vea equipado con estos sistemas. El fin es catalogar las obras a lo largo de este recorrido.