Ferrari ilusiona en los entrenamientos libres
Grandes sensaciones en los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de China para Ferrari. La escudería italiana copó el podio, con un sensacional Felipe Massa en primera posición y con Fernando Alonso en la tercera. Entre medias se coló Kimi Raikkonen, que demostró que también será un piloto a seguir en el circuito de Shanghai. Parece que en Maranello se han puesto las pilas y han conseguido mejorar su monoplaza, aunque estos resultados tampoco son los más indicados para sacar conclusiones definitivas. Más que nada porque Red Bull fue a otro rollo, con un programa bastante más conservador. El gigante austríaco será el rival a batir en Asia, siempre y cuando se relajen los ánimos entre Vettel y Webber.
Centrándonos en el equipo del ‘Cavallino Rampante’, el rendimiento de Massa está empezando a dejar de ser una sorpresa para convertirse en una grandísima noticia. Se prevé que el brasileño saque su mejor arsenal en la tanda de calificación y ‘ayude’ a Fernando en la carrera. Órdenes de equipo aparte, esto es lo lógico y por el bien de los dos, ambos deben respetar sus roles. El caso es que Ferrari tuvo un buen ritmo de carrera y dejó impresiones muy gratas. Si no tienen ningún imprevisto mecánico, podrían incluso luchar por la victoria, aunque acabar entre los tres primeros es el objetivo más realista.
En el horizonte también tenemos a Vettel y Webber. El australiano acabó quinto y no va a hacer concesión alguna, menos después de las agresivas declaraciones del germano. No se entienden demasiado bien las palabras del germano, toda vez que lo lógico hubiera sido intentar calmar las aguas. En fin, que cada uno es como es y el tricampeón del mundo se ha propuesto ser el ‘enfant terrible’. Después también asoman los corredores de Mercedes. Y aquí tampoco se sabe quién es más peligroso, si Rosberg o Hamilton. El teutón ha acabado cuarto y el británico sexto, lo que puede invitar a pensar que si no llega a ser por las dichosas órdenes de equipo, el resultado de los dos en Malaisia hubiera sido muy distinto. Con estos ingredientes, la tercera prueba del Mundial se presenta apasionante, con muchas alternativas y posibles polémicas, lo que añade más morbo a la carrera. Si todo sale según lo previsto, Fernando Alonso acabará en el podio y quién sabe en qué lugar. Ojalá sea lo más arriba posible. En Ferrari sueñan con ello.
