Facel Vega, la breve historia de la marca de coches de lujo francesa
|Este año Francia celebra el 60º aniversario del nacimiento de Facel-Vega, en 1954, y también el medio siglo transcurrido desde la liquidación de esta marca, la última que compitió por el mercado de los coches de lujo en el país vecino. Una década prodigiosa de modelos elegantes y deslumbrantes que aún hoy despiertan nostalgia.
Facel-Vega no se fue sin dejar rastro, al contrario. Solo un año después de su despedida aparecería el primer Citroën DS que heredaba mucho del estilo y las innovaciones que había aportado Forges et Ateliers de Construction Eure-et-Loir (Facel) durante su efímera historia. Sin embargo, cuando el 31 de octubre 1964 se cerraron sus plantas de Dreux y Amboise, se abrió un vacío que nunca se ha vuelto a llenar.
En aquel momento el Estado francés apoyó a Citroën, Renault, Peugeot, Simca y Panhard pero consideró que los fabricantes de automóviles de lujo no eran una prioridad, lo cual quedó bien reflejado con la introducción en 1956 de un impuesto de circulación que castigaba a los coches más grandes y potentes, entre ellos el primer modelo de la marca: el Facel Vega, bautizado con el nombre de una de las estrellas más luminosas del firmamento, y que dio lugar al nombre comercial de la firma.
Curiosamente los modelos Facel Vega cosecharon más éxito fuera de Francia que dentro. Caracterizados por sus pequeños alerones traseros, la parrilla abierta, su amplio parabrisas y sus grandes e inimitables faros verticales, lograron hacerse un hueco en el mercado. Fueron muchas las celebrities de la época que sucumbieron a sus encantos: Ringo Starr, Ava Gardner, Maurice Trintignant, Tony Curtis, Danny Kaye, Joan Fontaine, el sultán de Marruecos o el presidente de México, entre otros.
En sus diez años de vida, Facel Vega fabricó 2.900 vehículos. Sus modelos de más éxito fueron el Excellence y el HJK500 y su motor de 5.9 litros, pero el fiasco del Facellia de 1959, con un motor que se sobrecalentaba, precipitó la caída de la firma que ya arrastraba serios problemas financieros.
Como una estrella fugaz, Facel Vega iluminó durante un breve lapso de tiempo el mundo del motor dejando una huella imborrable. Hoy los modelos originales alcanzan en las subastas precios de hasta 300.000 €.
Fotos – Le Monde