He aparcado y mi coche se lo ha llevado la grúa, ¿qué ha sucedido?

No hay sensación más amarga que ir a donde tu coche se encontraba aparcado y ver que no está, que ha desaparecido y te encuentras unos discos que ponen que está prohibido estacionar. ¿Qué ha pasado? Por lo general, sólo ha podido suceder tres cosas:

– Te han robado el coche. Es la opción menos probable, menos aún si encuentras discos de está prohibido estacionar y ves la calle sospechosamente vacía.
– Aparcaste con la presencia de estos discos e ignoraste que debías de mover el vehículo en algún momento antes de que el estacionamiento estuviera prohibido (si es que no lo estaba ya). No te queda otra que pagar la correspondiente multa e ir a retirarlo al depósito municipal de tu ciudad, pagando además por el servicio de grúa. Hay que matizar, además, que si el vehículo se encuentra en el depósito, cada día que esté allí aumentará la cantidad de dinero que necesitarás para retirarlo.
– Aparcaste en tu calle de siempre y a los días te encuentras con estos discos y no está tu coche. Tu coche, ha desaparecido y tú prometes y perjuras que los discos de prohibido estacionar no estaban ahí cuando tú aparcaste. No te preocupes, no has perdido el coche y seguramente ni siquiera tengas que pagar multa.

Éste es el último caso que vamos a tratar. Generalmente, tú aparcas el coche y si a los días no está, la policía local necesita esa zona libre para la realización de determinadas obras o un evento cualquiera (procesiones, cabalgatas, etc…)… no te pueden multar si el vehículo ya estaba aparcado cuando ellos colocaron los discos.

En estos casos, apuntan las matrículas de los vehículos que se encontraban aparcados cuando colocaron la prohibición de estacionar y, si llegado el día en el que no se puede aparcar sigue estando ahí, pueden pasar dos cosas: llevan el vehículo a otra zona de la ciudad donde hay aparcamiento de sobra o los llevan al depósito. En cualquier caso, no tienes que pagar la respectiva multa si aparcaste antes de que colocasen los discos de prohibido estacionar.

Probablemente este último caso sea el más frustrante de todos, porque al fin y al cabo se te puede olvidar o no ver que estaban los discos, pero mientras tú dormías en casa o salías a caminar en lugar de coger el coche, una grúa te lo mueve de sitio sin tu consentimiento y, en muchos casos, se desconoce si esto acarrea multa (que no es el caso). En cualquier caso, las medidas a seguir en los tres casos anteriores es la misma: llamar a la policía local. Allí la policía local debe de decirte qué ha hecho con el vehículo y, sobre todo, dónde se encuentra ya que en el caso de que lo mueva a otra zona, ésta varía para ciudad e, incluso, puede que haya ciudades que tengan más de una.