Ford investiga los coches con piel de tomate
|El título del post puede sonar a broma pero se trata de una noticia absolutamente real. Y además llega de la mano de una de las grandes marcas mundiales: Ford, que está colaborando con Heinz para investigar las posibles aplicaciones de la fibra del tomate al mundo del automóvil, con el objetivo de desarrollar algún tipo de material biológico útil para la fabricación de coches.
Ya hace algunos años que Ford viene apostando por la «producción biológica» mediante el desarrollo de componentes de automóviles que puedan ser fabricados con plásticos de origen vegetal, es decir, materias orgánicas como por ejemplo la piel seca de tomate, la cáscara de coco, la capa externa de los granos de arroz o el tejido de algunas raíces de plantas y árboles. Materiales reciclables que al no basarse en el petróleo atenúan el impacto medioambiental de la producción de automóviles y, como ventaja añadida, reducen considerablemente el peso del vehículo.
Dentro de esta línea de investigación, Ford Plastics (el departamento de la empresa dedicado a estas tareas) se puso a trabajar con grandes multinacionales como Coca-Cola Co, Nike, Procter & Gamble y ahora con Heinz y las pieles de tomate.
La empresa del famoso ketchup proporciona a Ford los residuos útiles en la fabricación de ciertas partes de sus coches, partes internas y escondidas del vehículo, sin que de momento nadie sepa cuáles son, porque Ford mantiene el asunto como top secret. ¿Temerosos del espionaje industrial o de que su prestigio quede en entredicho por ofrecer a sus clientes «coches de piel de tomate»?
Fotos – pddnet