2013: el gran reto de Latvala
Tras cinco temporadas en el equipo oficial de Ford sin haber conseguido el gran reto de derrotar al gran Sebastien Loeb y hacerse con el título de pilotos y/o de constructores, el piloto finlandés de 27 años afrontará su temporada más importante en un nuevo equipo, Volkswagen, a los mandos de un Polo R WRC en la que conseguir el título de campeón será su gran objetivo. Con Sebastien Loeb semirretirado ya no tiene excusas.
Y Jari-Matti Latvala es consciente de ello. Sabe que estos últimos años en Ford no obtuvo los resultados que de él se esperaban. Todavía conserva en su poder el récord de ser el piloto más joven en lograr una victoria en una prueba del WRC, Suecia en 2008, pero esas buenas expectativas no se han visto refrendadas a lo largo de estos años. El mismo lo reconoce, en un ejercicio de autocrítica, en una entrevista concedida a Autosport.com: “En cierto modo estoy decepcionado por estos años en los que no he podido conseguir el campeonato de constructores ni de pilotos”. Además ha reconocido que tenía un buen coche pero que le ha faltado consistencia: “El coche era muy competitivo, pero no tuvimos consistencia. Yo empujaba demasiado fuerte y acaba fuera de la carretera. Debería haberlo aprendido, pero parece que soy un aprendiz lento”.
Esa falta de regularidad, debido quizás a una excesiva fogosidad del finlandés, le ha lastrado a lo largo de estas cinco temporadas, en las que ha logrado siete triunfos y el subcampeonato mundial en el año 2010, aunque finalizó a 105 puntos de Loeb, una distancia excesiva. La teoría la tiene bien aprendida, veremos si en el 2013 la pone en práctica: “Si pierdo el tiempo, entonces empujo duro y trato de recuperar de nuevo el tiempo perdido, y luego me voy fuera de la carretera, en lugar de admitir y aceptar la situación”.
Así quedó su Ford tras su accidente en Portugal 2009
Su gran rival en la próxima temporada será su compatriota Mikko Hirvonen que pilotará un Citroën DS3 WRC, y que tras el semirretiro de Loeb será el indiscutible número uno de la marca francesa. De las prestaciones del nuevo Polo R WRC dependerá, en gran parte, las opciones de Latvala. Un coche del que admite no conocer prácticamente nada: “Yo no sé nada del coche. Necesitamos ver cómo es el coche, pero el equipo será grande y será un gran reto”.
El próximo enero tendremos la ocasión de ver en Montecarlo las prestaciones del Polo y también el cambió de Latvala, que según sus palabras intentará controlarse en los malos momentos para no tirar por la borda una nueva temporada debido a un exceso de fogosidad.
