Tesla necesita inversores para lanzar su Model 3
Esta es la cuestión que se plantean los inversores. Se crea una empresa apretándose el cinturón, pero después de dos o tres años, las finanzas están estabilizadas, y los beneficios se ven regularizados. Esta es al menos la teoría, porque Tesla no funciona exactamente así. La sociedad creada en 2003 ha vuelto a registrar unas pérdidas de 282 millones de dólares en el primer trimestre de este año. Si no hubiese presentado su Model 3 hace algunas semanas, el fabricante de California hubiera tenido posibilidades de convertirse en una empresa rentable en 2017, e incluso en este mismo año.
Pero, Tesla ha presentado su Model 3, y ha tenido un éxito sin precedentes. Elon Musk, el carismático patrón de Tesla dijo a mediados de abril que tenía cerca de 400.000 encargos. La sociedad ha sido más precisa hoy en día, revelando que la cifra exacta es de 373.000 encargos. El hecho es que 12.000 han sido anulados, un tercio por Tesla, y dos tercios por parte de los clientes.
El problema de cómo producir estos cientos de miles de coches es enorme, y eso que Elon Musk ha adelantado el planning de producción. El objetivo está en producir 500.000 vehículos en 2018, pero esto no será posible sin grandes inversiones. Para ello, Tesla Motors va a vender 6,8 millones de acciones, mientras que Elon Musk va a vender 2,8 millones de sus propias acciones personales, ejerciendo su derecho a unas stock-options, por un total de 5,5 millones de acciones. Elon Musk debería así incrementar su control sobre la empresa, haciendo que entren dos mil millones de dólares en las cuentas.
La pregunta ahora está en saber quién va a hacer la inversión. Desde luego no será el inversor tradicional con la esperanza de percibir un dividendo a final de año. Tampoco será el inversor que cree en la rentabilidad a corto plazo de la empresa. Tesla necesita contratar y formar a más de 1.000 personas para instalarlas en puestos de trabajo que todavía no están creados. No cabe duda de que la ecuación Tesla tiene todavía muchas incógnitas por resolver.
Foto – Engadget
