Tokyo Auto Salon, la locura del tuning japonés
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Durante casi tres décadas, el Tokyo Auto Salon (ojo, no confundirlo con el Tokyo Motor Show) ha sido el lugar de encuentro para los amantes el tuning en el país del sol naciente y un interesanet escaparate de frivolidades para los fabricantes de todo el mundo..
Tradicionalmente, las principales marcas de Japón muestran aquí sus últimos modelos rematados con los acabados más asombrosos, pero en las últimas ediciones también las marcas europeas y norteamericanas se han sumado a la fiesta. El mejor ejemplo, en la imágenes que acompañan este post: los flamantes Mercedes SL y Lamborghini Murciélago cubiertos de cientos de miles de pequeñas de piedras de Swarovski. Dos juguetes valorados en 300.000 y 500.00 euros respectivamente.
Otro ejercicio estético a medio camino entre el lujo y la horterada que ha dado la campanada en este salón ha corrido a cargo de una marca nipona, como debe ser. Nos referimos al Nissan GT-R chapado en oro de 24 kilates. Este es un trabajo firmado por Kuhl Racing, maestros internacionales del tuning.
En definitiva, se trata de las luces de un evento que está en la misma línea que el famoso show del SEMA de Las Vegas, que se celebra en noviembre, o el Essen Motor Show de Alemania, aunque en este caso con el toque especial japonés, único e inconfundible. Y es que aquí incluso las azafatas del salón llaman la atención, y no solo por su belleza sino por su look manga-chic. Como salidas de una serie de dibujos animados.
Fotos – Bild