Leyendas urbanas sobre el consumo de los coches
Las gasolineras más baratas, las mejores horas para repostar, la conducción eficiente… Son muchos los factores que determinan el consumo de nuestros vehículos, aunque también hay muchos mitos que damos por ciertos. Son las leyendas urbanas sobre el consumo de nuestros coches. Estas son las más habituales:
- Bajar las pendientes en punto muerto ahorra combustible. Mucha gente lo hace, creyendo que es mejor que llevar una marcha engranada, pero es falso: circulando sin acelerar con una marcha puesta las ruedas hacen funcionar al motor y no al revés, por lo que el consumo de su coche resulta prácticamente nulo. Del otro modo, circulando en punto muerto, sí se produce un pequeño gasto de carburante: el del propio motor para mantenerse en marcha, por no mencionar el riesgo que conlleva circular así, con menos control sobre el vehículo.
- Circular con las ventanillas bajadas, mejor que con el aire acondicionado en marcha. Se pasa un poco más de calor pero compensa, dice la leyenda urbana. Lo cual es también falso. A partir de una velocidad de 70 km/h, sucede exactamente lo contrario pues el freno aerodinámico del aire entrando por las ventanillas consume más energía de la que se necesita para que el aire acondicionado funcione.
- Circular con las luces encendidas aumenta el consumo de carburante, lo cual es cierto pero se trata de un aumento de consumo casi nulo, de apenas 0,1 l/100 km en el caso de los tradicionales faros halógenos o de xenón, y casi inexistente en los vehículos con luces de día con tecnología LED.
- Los vehículos híbridos y eléctricos son los que menos consumen y por tanto, son más baratos para nuestro bolsillo. ¿Quién va a negar eso? Sin embargo, no es del todo cierto, al menos no siempre. Claro que el consumo de carburante de los coches eléctricos es nulo, pero teniendo en cuenta sus precios de venta, muy superiores a los coches de motores de combustión, los gastos que requiere un coche durante el primer año (seguros, impuestos, carburante o electricidad) los números no compensan.
Fotos – El Diario
