El dato de inflación de mayo en Estados Unidos se publica este miércoles, justo antes de que la Reserva Federal (Fed) emita su comunicado sobre política monetaria. Pese a que la inflación se ha mostrado más pegajosa de lo esperado, el consenso y el banco central todavía prevén que los precios desciendan hacia una horquilla del 2% al 3% en 2024, y que alcancen el objetivo del 2% a lo largo de 2025.
Así, los inversores anticipan que la Fed comenzará a bajar tipos en septiembre o diciembre de este mismo año, y los analistas de Schroders se preguntan cómo deberían posicionarse las carteras en términos de sectores y estilos de renta variable, si finalmente se relajan las presiones inflacionistas.
SECTORES DEFENSIVOS Y CÍCLICOS
Tina Fong, estratega en Schroders y Ben Read, economista de la gestora, explican que la mayoría de los sectores defensivos (servicios públicos y la sanidad) obtienen mejores resultados cuando la inflación es alta, ya que son más resistentes al aumento de los precios, pues los consumidores siguen necesitando comprar artículos de primera necesidad, como alimentos y cuidados sanitarios. La excepción son los servicios de comunicación, que parecen obtener malos resultados en todos los entornos inflacionistas.
Al mismo tiempo, algunos de los sectores cíclicos, como el energético y el financiero, tienden a ir bien cuando la inflación es alta. Los ingresos del sector energético dependen de los precios del petróleo y el gas, que es un componente clave de la tasa general del IPC.
Y los activos financieros tienden a hacerlo bien en un entorno de inflación y tipos de interés altos, ya que aumentan los ingresos netos obtenidos por los bancos. Los ingresos netos por intereses son los beneficios derivados de prestar a un tipo más alto que los intereses pagados a los depositantes.
En comparación, otros sectores cíclicos, como el tecnológico y los de consumo discrecional, suelen obtener mejores resultados cuando la inflación es baja. Esto se debe a que cuando la inflación es baja, los tipos de interés tienden a ser bajos.
Los valores tecnológicos son más sensibles a unos tipos de interés más altos porque generan una proporción considerable de sus beneficios en el futuro, por lo que estos flujos de caja futuros se descuentan a un tipo más alto.
En el sector de consumo discrecional, algunos de los activos tienen una exposición significativa a la tecnología para facilitar su negocio. Al mismo tiempo, cuando aumenta la inflación, los consumidores suelen dar prioridad al gasto en artículos de primera necesidad frente al gasto discrecional en bienes y servicios.
ESTRATEGIAS DE RENTA VARIABLE
Estos expertos añaden que las estrategias de renta variable más defensivas tienden a obtener mejores resultados cuando la inflación es elevada. Porque tanto los activos de volatilidad mínima como los de altos dividendos están más expuestos a sectores defensivos. Pero los índices de altos dividendos y de value tienen una mayor concentración de empresas del sector energético, que se benefician de un entorno de inflación creciente.
Por el contrario, la estrategia basada en el momentum tiende a obtener buenos resultados cuando la inflación es baja, aunque sea más defensiva en comparación con el mercado. Esto podría deberse a que estos activos que se benefician de la recuperación de la renta variable en general cuando la inflación y los tipos son bajos. En los últimos tiempos, la estrategia de momentum también se ha visto afectada por un aumento de la concentración de activos tecnológicos, que tienden a obtener buenos resultados cuando se reducen los tipos de interés.
En cuanto a los estilos más cíclicos, el crecimiento y la calidad suelen obtener mejores resultados cuando la inflación es baja. Ambos sectores tienen una elevada ponderación hacia la tecnología. Pero el estilo de calidad no tiene un resultado claro cuando la inflación es alta, a diferencia de los activos de crecimiento, que obtienen malos resultados. Esto podría deberse a que el índice de calidad está más invertido en sectores defensivos.
Por otra parte, los activos de pequeña capitalización se comportan como las estrategias más defensivas, ya que obtienen mejores resultados cuando la inflación es alta que cuando es baja. Esto se debe probablemente a que los activos de pequeña capitalización tienen una mayor ponderación hacia algunos sectores defensivos y financieros.
CONCLUSIÓN
Con la inflación estadounidense en el 3,5%, dentro de la horquilla del 3 al 5%, los sectores y estilos de renta variable más defensivos suelen obtener buenos resultados, explican estos expertos. Aunque los sectores cíclicos, como el energético y el financiero, también suelen obtener mejores resultados.
En cambio, los activos de crecimiento, tecnológicos y de consumo discrecional suelen tener dificultades en este entorno de inflación. Sin embargo, estos activos obtuvieron buenos resultados el año pasado cuando la inflación bajó del 5%, impulsados por la mejora de los beneficios.