El índice S&P 500 ha alcanzado nuevos máximos, liderado por un puñado de grandes valores tecnológicos, que a su vez se han visto impulsados por el revuelo de la inteligencia artificial (IA). Pero eso no significa que todo el mercado de renta variable estadounidense esté caro.
Es la visión de mercado de John Bailer, subdirector de renta variable y gestor de carteras de renta variable estadounidense de Newton Investments, propiedad de BNY Mellon Investments Managers, que ve oportunidades en sectores como el energético y el financiero. Su consejo es diversificar alejándose del índice para encontrar valor e ingresos en el mercado estadounidense.
Según Bailer, las oportunidades en el mercado de renta variable estadounidense existen para quienes estén dispuestos a mirar fuera del S&P 500.
"Es un momento único en el que hay siete valores que son los '7 magníficos'", afirma Bailer. "Son grandes empresas, pero creo que los índices de EEUU están muy expuestos a ellas. Nosotros aportamos cierta diversificación al índice y a esos valores", argumenta.
APUESTA POR LAS ACCIONES DE VALOR
Si echamos la vista atrás a la última década o más, Bailer señala que la inversión en crecimiento floreció gracias a una combinación de tipos de interés bajos, inflación baja y flexibilización cuantitativa (QE) de los bancos centrales. Pero cree que en el entorno actual de tipos más altos e inflación, las acciones estadounidenses de valor parecen baratas, tan baratas como la burbuja tecnológica de finales de los 90 y principios de los 2000.
En este sentido, señala la gran diferencia entre los quintiles de valores más caros y más baratos del S&P 500 (según los niveles de valoración PER). El quintil más barato parece barato históricamente en relación con el quintil más caro, afirma.
Pero este grupo también parece barato en relación con su propia historia, añade, con un PER de aproximadamente 9,5 veces frente a una media histórica de unas 10 veces.
En este contexto, Bailer afirma que el equipo de renta variable estadounidense de Newton está viendo oportunidades en empresas de calidad que cotizan con rendimientos elevados del flujo de caja libre y múltiplos bajos de PER, atractivos desde una perspectiva de valoración intrínseca.
"Ahora mismo hay oportunidades de obtener características de valor en el mercado estadounidense", añade. "Creemos que verdaderamente hay una gran oportunidad para diversificar su cartera en esos valores de PER bajo y mantenerse alejado de algunas de esas empresas caras que abundan en el índice S&P 500", indica.
LOS SECTORES MÁS ATRACTIVOS
Bailer destaca las finanzas y la energía como dos sectores en los que el equipo está viendo oportunidades de valor. Según su valoración, las empresas energéticas tienen buenos balances y generan una cantidad significativa de flujo de caja libre con poca o ninguna deuda neta. Porque la oferta y la demanda de petróleo están bien equilibradas, lo que permite mantener unos precios atractivos, añade.
Los valores energéticos también son atractivos desde el punto de vista de los dividendos, afirma Bailer. "Estamos viendo que muchas oportunidades en el sector energético están dando grandes dividendos a los accionistas", añade.
Así, señala que la energía solo representa el 4,6% de la capitalización bursátil del S&P 500, aunque representa el 11,1% de sus ingresos. Asimismo, Bailer afirma que el sector financiero representa el 21,6% de los ingresos del S&P 500, pero solo el 13,2% de su capitalización bursátil.
En el sector financiero, ve oportunidades en las aseguradoras y en algunos bancos. "Creemos que los valores no son caros, tienen una buena relación riesgo/rentabilidad y pagan dividendos altos, que son sostenibles y pueden crecer", comenta.
En cambio, Bailer observa que los '7 magníficos' representan por sí solos el 28,3% del índice S&P 500 por capitalización bursátil, pero solo generan el 16,9% de los ingresos.
CRECIMIENTO DE LOS DIVIDENDOS
Este gestor afirma también que el mercado estadounidense tiene ratios de retribución relativamente bajos en comparación con el histórico, pero cree que tienen margen para subir. "Puede que en EEUU la rentabilidad por dividendo no sea tan alta, pero lo importante es que hay buenas perspectivas de crecimiento de los dividendos, lo que puede compensar algunas de las presiones inflacionistas", añade.
"Esa es la diferencia que vemos entre la renta variable y la renta fija. La renta variable no tiene cupones fijos y puede crecer con el tiempo, y creemos que EEUU es uno de los mejores lugares para mostrar ese crecimiento de los dividendos en los próximos cinco o diez años, debido a los bajos ratios de retribución", concluye.