A principios de 2018, se aprobó legalmente la capacidad de los partícipes en planes de pensiones para rescatar sus ahorros en estos vehículos a partir de los diez años de antigüedad de la inversión. El primer rescate posible será en 2025 y las gestoras y los bancos esperaban que esta medida incentivara su contratación por parte de los españoles, al quitarles barreras a la hora de recuperar el dinero. Sin embargo, en este primer año, las expectativas no se han cumplido. Lo ha reconocido la propia Inverco, la patronal del sector: “no ha reactivado las ventas”.
Los planes de pensiones del sistema individual registraron en 2018 entradas netas, por valor de 585 millones de euros. Sin embargo, estas captaciones son las menores desde el año 2014, según Inverco. En los cuatro años anteriores, las entradas netas de este sistema siempre estuvieron en el nivel de los 1.000 millones, por lo que la caída ha sido a la mitad, y precisamente en el año en que, en teoría, deberían haber aumentado al ser liberados parcialmente.
A Juan José Cotorruelo, presidente de la Agrupación de Fondos de Pensiones de Inverco, no le queda más remedio que reconocer que “activar la liquidez a los diez años en los planes de pensiones no ha reactivado las ventas”, aunque el directivo prefiere ver el vaso medio lleno. “Está todo por hacer”, ha confiado en la presentación de perspectivas para 2019 de la asociación.
Abrir la liquidez de los planes de pensiones para participaciones con, al menos, diez años de historia no fue acogido por el sector financiero como algo esperanzador. Todo lo contrario. Gestoras, bancos y aseguradoras temían y siguen temiendo que, a partir de 2025, cuando se producirán las primeras prestaciones por este concepto para participaciones anteriores al 31 de diciembre de 2015, el sistema individual se descapitalice con ventas masivas. Entre tanto, su esperanza es que esta ventana de liquidez haga más atractivo el producto y se contrate más, cosa que, de momento, no está ocurriendo.
UN 86% APORTA MENOS DE 900 EUROS A SU PLAN
La foto para los planes privados de pensiones empeora si se tiene en cuenta el ‘vago’ comportamiento de los que ya son partícipes de los mismos. En total, un 86% de estos no aporta más dinero a su plan o aporta menos de 900 euros al año, cuando el límite máximo anual permitido para las aportaciones es de 8.000 euros.
En concreto, dos de cada tres españoles (un 66,7%) no aportaron ninguna cantidad extra a su plan en 2017, último dato disponible de Inverco.
Según Ángel Martínez-Aldama, presidente de la asociación, estas pobres cifras son explicadas en parte por el insuficiente salario medio que hay en España, que ronda los 1.600 euros mensuales, según las últimas estadísticas públicas.
La edad media de los partícipes se sitúa en torno a los 50 años. Casi la mitad de los partícipes (un 49,8%) se concentra entre los 46 y los 60 años. El 30% tiene edades hasta los 45 años, y con más de 61 hay el 20%.