La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) quiere aclarar y homogeneizar con Europa las categorizaciones que tiene establecidas de los fondos de inversión en España, especialmente en lo que respecta a los fondos más conservadores, los fondos monetarios y los fondos de renta fija. Este tipo de fondos, con un gran volumen bajo gestión dado el perfil conservador que siempre ha mostrado el inversor español, representan un 22% del patrimonio total, según Inverco.
Los fondos donde el supervisor pone la lupa con más atención son los monetarios, un tipo de vehículo que invierte en deuda a muy corto plazo y siempre en euros. El reglamento europeo de 2017 sobre estos productos tiene por objetivo establecer unas normas comunes en la UE en relación con la composición de la cartera, los activos aptos para invertir, su vencimiento, liquidez y diversificación, así como la calidad crediticia de los emisores y de los propios instrumentos para evitar una disparidad en los niveles de protección de los inversores y prevenir y mitigar cualquier riesgo potencial de contagio derivado de posibles retiradas bruscas y masivas de dinero por parte de los inversores.
De esta forma, todos los fondos que hoy son calificados como monetarios de corto plazo o monetarios tendrán que cumplir los requisitos del reglamento europeo (entre ellos, que la inversión sea diversificada y no se concentre en un único organismo o que los derivados se utilicen en exclusiva para cubrir riesgos) para poder seguir siéndolo, y tendrán que hacerlo antes del 21 de enero de 2019. Y los que no se ajusten a estos requisitos, pasarán a ser considerados como fondos de renta fija euro a corto plazo, un nuevo apartado que establecerá la CNMV.
Si bien antes en el supervisor español la subcategorización de renta fija euro era única, ahora contará con dos apartados: renta fija euro a corto plazo (con activos hasta un año de duración) y renta fija euro (para más de un año). Así, los fondos monetarios que pasen a ser fondos de renta fija euro a corto plazo, así como los de renta fija euro con duración menor del año y que también tengan que readaptarse, tendrán que modificar su folleto y su documento de datos fundamentales para el inversor en el plazo de un año desde la entrada en vigor de la circular de la CNMV.
